Poco tardó Macarena Olona en reaccionar ante el éxito no cuestionable de su formación en Castilla y León. A las pocas horas de conocerse los resultados, la más que segura candidata a la Presidencia de la Junta de Andalucía por el partido de extrema derecha lanzó, más que publicó, un tuit desde su cuenta personal, en la que con un Moreno Bonilla en el centro y con protagonismo en la fotografía, aparece rodeado de los barones del PP a su vez presidentes autonómicos en sus territorios (Feijóo, Ayuso, Mañueco, López Miras y Juan José Vivas).

Junto a la fotografía aparece un texto en que le insta al presidente de la Junta que convoque y anticipe las elecciones en Andalucía: “Las #EleccionesCyL13F han demostrado que los partidos que están destruyendo a España están en descomposición. @JuanMa_Moreno no les des la oportunidad de rearmarse. #Andalucia merece esperanza. #EleccionesAndaluzasYa”.

Olona “sobrada”

La resaca, así como la euforia de Olona, ha hecho que la presión sobre Moreno Bonilla para que anticipe los comicios regionales que deberían celebrarse a finales de año, se reitere desde Vox desde pocas horas después de conocerse los resultados de Castilla y León.

Unos comicios que tras la necesidad del PP de Mañueco de gobernar en coalición con Vox, con consejeros y vicepresidente de extrema derecha como ya ha exigido el propio líder nacional, Santiago Abascal, habrán hecho que el PP andaluz y Moreno Bonilla hayan decidido retrasarlas al máximo en contra de lo que hasta hace pocas semanas tenían decidido. Se hablaba incluso de las intenciones de convocarlas en abril.

Macarena, una candidata ultra pero de peso a la Junta

Con Vox en auge y subida electoral testada en Castilla y León, y con una candidata como Macarena Olona, con mucho más tirón y popularidad que el apenas conocido, novato e ignoto, Juan García-Gallardo, el miedo ha llegado a San Telmo porque las perspectivas electorales, hasta ahora muy optimistas para el PP andaluz, se han nublado. En la derecha andaluza teme que los buenos resultados de Vox en Castilla y León, que hacen que el próximo Gobierno regional esté en las manos de la extrema derecha, se repliquen en esta comunidad.

También temen en San Telmo una posible movilización que esta amenaza de sobrerrepresentación y poder real de extrema derecha pueda producir entre los más de 400.000 mil electores de izquierdas que se quedaron en su casa en las elecciones de 2018. Cabe recordar que en esos comicios que llevaron al poder regional al PP, Vox obtuvo 12 diputados. Un suelo muy alto para Vox para jugárselo el PP adelantando las elecciones. Por eso los populares andaluces van a cambiar sus planes y esperarán a que “amaine el temporal”… si es que amaina y no empeora.