El piso y el ático que Isabel Díaz Ayuso y su pareja, Alberto González Amador, disfrutan en el céntrico barrio de Chamberí tienen nexos notariales muy interesantes con otras compras y adquisiciones sin los que no se entendería el pasado y presente tanto de la baronesa territorial como del PP a nivel nacional.

Relacionado La empresa con la que medió el novio de Ayuso recibió diez millones de euros de la Xunta en el primer año de pandemia

La vivienda en propiedad del novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid está escriturada por el mismo notario que certificó en 2006 la compra por parte del PP del inmueble que desde entonces es sede central del partido en la calle Génova, José María de Prada Guaita, tal y como ha adelantado el HuffPost y ha comprobado este medio. El ático que la pareja disfruta en régimen de alquiler, adquirido por la empresa Babia SL, propiedad de Javier Luis Gómez Fidalgo -representante de la pareja de Ayuso ante Hacienda-, fue escriturado por el mismo notario del ‘caso Avalmadrid’, Fernando Gomá Lanzón, tal y como consta en las notas del registro a las que ha accedido en exclusiva ElPlural.com.

Dos notarios de confianza que han participado en operaciones favorables para los intereses tanto del PP, en el caso de la compra de Génova por un valor de 37 millones de euros, como de la familia Ayuso, perseguida por el caso ‘Avalmadrid’ desde los comienzos de la andadura de la presidenta regional en política. Fuentes consultadas por ElPlural.com explican la importancia de tener un notario de confianza, ya que, más allá de la burocracia, se aseguran tanto intimidad como “privacidad” en el proceso.

José María de Prada Guaita

Ambas adquisiciones escrituradas por José María de Prada Guaita no han estado exentas de polémica. Mientras que el lujoso piso de González Amador está en el ojo del huracán por haber sido adquirido tras la presunta comisión de hasta cuatro delitos por su parte, en los que el empresario habría defraudado cerca de 350.000 euros con sociedades pantalla y falseando documentos para inflar costes, la compra de la sede central del PP en Génova,13 llamó la atención desde el principio por su bajo precio en el momento de algidez del ‘boom inmobiliario’. Concretamente, el valor del mercado de esta adquisición fue un 35% por debajo de lo que costaba el metro cuadrado en la zona, la más lujosa de oficinas de Madrid en aquel momento.

ElPlural.com ha accedido a la nota de registro de ambas propiedades. Mientras el cuartel general del PP nacional fue hipotecado con el Banco Español de Crédito por 37 millones de euros, la hipoteca solicitada por González Amador fue de 500.000 euros y cerrada con el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA).

La información registral detalla las medidas, los metros cuadrados y las disposiciones de ambos inmuebles: la sede de los populares cuenta con 10.400 metros cuadrados entre su “planta baja, entreplanta, siete plantas de oficinas, un ático y un sobreático”. Además, Génova,13 cuenta con hasta cuatro sótanos dedicados a aparcamiento.

Por lo que respecta al piso en propiedad al 100% que Alberto González Amador adquirió el 27 de julio de 2022, la vivienda cuenta con más de 183 metros cuadrados útiles, además de las zonas comunes de la comunidad, divididos en un “vestíbulo, distribuidor para el comedor-estar, despacho, cocina, aseo y dormitorio de servicio, cuarto de aseo, cuarto de baño principal, dormitorio principal, tres dormitorios y un pequeño vestíbulo de servicio”.

El edificio del hogar compartido por la presidenta de la Comunidad de Madrid cuenta con siete plantas, 14 viviendas, tres comercios y una oficina. Además, los servicios comunitarios son integrales y muy completos, contando con grandes zonas ajardinadas, ascensor y portero. 

Fernando Gomá Lanzón

Si el piso en propiedad de la pareja de Ayuso está escriturado por el mismo notario que la sede central del PP en la calle Génova, resulta aún más sorprendente la conexión del notario que escrituró el ático que la presidenta y su novio disfrutan en régimen de alquiler con el ‘caso Avalmadrid’. En concreto, con el embargo de la finca en Sotillo de la Adrada de 556 metros cuadrados que la familia Díaz-Ayuso disfrutaba en esta localidad situada en el municipio de Ávila. 

Cabe recordar que la empresa de los padres de Isabel Díaz Ayuso debía 400.000 euros  a Avalmadrid. Como garantía, la familia de Ayuso aportó esta propiedad ubicada en el polígono industrial del mencionado pueblo. Una garantía, la de la finca, valorada 14 veces menos que el crédito concedido.

Un préstamo que no devolvieron en diez años. Mientras tanto, la presidenta de la Comunidad de Madrid y su hermano se apropiaron, a través de donaciones, de dos inmuebles familiares que debían cubrir este impago.

Al final, Avalmadrid subastó la finca por 544.000, pero la subasta quedó desierta por falta de licitadores. En la actualidad, Avalmadrid se ha quedado con esta finca y los Díaz-Ayuso no han devuelto el préstamo a la empresa semi-pública. 

Por su parte, el ático que Ayuso y González Amador utilizan para ocio y gimnasio, es propiedad de la empresa Babia SL, participada al 100% por Javier Luis Gómez Fidalgo, economista leonés, prolífico empresario y asesor ante Hacienda del compañero sentimental de la presidenta de la Comunidad de Madrid. Una conexión muy ventajosa para los intereses de la familia y que demuestra el buen grado de conocimiento entre ambas partes.

Pues bien, tal y como ha podido comprobar ElPlural.com en la nota de registro de la compraventa de este ático, ubicado justo encima del piso en propiedad de Alberto González Amador en el céntrico distrito de Chamberí (Madrid), esta compraventa fue autorizada por Fernando Gomá Lanzón.

Una adquisición de Babia SL al contado, sin hipoteca, que llama la atención teniendo en cuenta tanto las características del inmueble y la zona en la que se ubica, con precios disparados, como el nivel de facturación de esta mercantil dedicada a la compraventa: según los datos a los que ha podido acceder ElPlural.com a través de Axesor, consultora especializada, su importe neto de la cifra de negocios en los últimos años registrados fue de 271.291 euros al cierre de 2021 y de 91.107 en diciembre de 2022 -el ático fue adquirido en 2023-.