La Ley Trans y la nueva norma sobre el aborto impulsadas por el Ministerio de Igualdad aprobaron el pasado jueves de forma holgada en el Congreso de los Diputados. Y es que este último ‘hito’ del Gobierno de Pedro Sánchez no solo ha aparecido en la prensa extranjera -como en la revista estadounidense ‘Time’-, sino que Naciones Unidas (ONU) ha aplaudido ambas medidas.

Expertas de la ONU, que han trabajado en el desarrollo de ambas normas, han elogiado la “nueva legislación feminista” con marca de Irene Montero a través de un comunicado. En el escrito, las nueve integrantes de la organización mundial señalan que ambas normas pertenecen a una “ambiciosa agenda para el progreso de la sociedad española”.

En la carta figuran las firmas de figuras de renombre como Dorothy Estrada-Tanck, presidenta del grupo de trabajo sobre la discriminación contra las mujeres y niñas de la ONU; Ivana Radačić, vicepresidenta del mismo equipo; Darida Shaheed, relatora sobre el derecho a la educación; Alexandra Xanthaki, relatora de los derechos culturales; Víctor Madrigal-Borloz, del equipo para la violencia y discriminación sexual o de género; y Thaleng Mofokeng, para la salud física y mental, entre las más destacados.

De esta manera, mencionan algunos detalles de las leyes, tales como que la norma facilita el acceso seguro y directo a la sanidad pública o el permiso de baja laboral por regla dolorosa. Es así como también enfatizan el foco contrario, es decir, la postura del PP y Vox, que votaron en contra, instando así a que estas leyes “deben ser protegidas del atractivo populista que las fuerzas regresivas pueden ver en la explotación de discursos antiaborto, antieducación y antitrans”, evidenciando así algunos protocolos tales como el impulsado en Castilla y León, en el que se llama a mostrar ecografías 4D y escuchar el latido fetal a las mujeres embarazadas.

Es por este camino como se ensalza con especial atención que “la educación sexual integral formará parte de todos los años de escolaridad obligatoria, con la que se protegerá aún más la autonomía corporal de las mujeres”.

La Ley Trans española erradica “obstáculos humillantes y dañinos”

Al entrar al detalle, los firmantes del comunicado ponen de relieve que el proceso que ha culminado con la aprobación de la norma dirigida al colectivo trans y que ha contado con el asesoramiento de la ONU, indica que el hecho de que se permita que las personas trans ya puedan materializar su autodeterminación “elimina obstáculos arbitrarios, humillantes y dañinos para la persona humana”.

Y es que también se hacen eco de los arduos debates que se han iniciado en torno a la norma y que ha supuesto discrepancias dentro del movimiento feminista español -incluso llegando a fragmentar la marcha del 8M en 2022-. “La legislación armoniza el sistema español de reconocimiento legal de la identidad de género a través de la autoidentificación, identificada por la ONU como mejor práctica”, señalan, colocando así de forma correcta “la carga de la prueba en la parte recurrente y en el Estado, y no en la persona trans u otras de género diverso”.

El fondo de la Ley Trans y la nueva Ley del aborto

Teniendo en cuenta esta positiva valoración de Naciones Unidas, convienen enfatizar los detalles más relevantes de ambas normas.

En cuanto a la Ley Trans, a partir de ahora los mayores de 16 años podrán cambiar de sexo sin necesidad de acreditar informes médicos ni psicológicos, se acaba con las terapias de conversión -que estarán penadas con gasta multas de 150.000 euros-, se refuerza la lucha contra el estigma de las personas trans y su discriminación en distintos ámbitos sociales -tales como la brecha laboral de las mujeres trans-, además de que consigue hacer avances en la educación inclusiva.

“Soy consciente de que el camino no acaba aquí, que no hemos conseguido incorporar las realidades no binarias, las personas trans migrantes y otras que descubriremos avanzando. Hemos dado el paso de gigante tras grande que hemos podido”, reivindicó la titular de Igualdad, Irene Montero, desde la tribuna del Congreso de los Diputados el mismo día que se dio luz verde a la ley.

En paralelo, entre las novedades que contempla la nueva ley del aborto a diferencia de la impulsada por el gobierno socialista de 2013, se devuelve a las menores de 16 y 17 años realizar la interrupción voluntaria de su embarazo sin el consentimiento de sus padres -ya que el PP eliminó esta cláusula en 2015-, se mantiene la objeción de conciencia de los médicos y se incluye -por primera vez en la historia- la baja laboral para aquellas mujeres que sufran reglas dolorosas, mejorando así el derecho por la salud menstrual.