El Partido Popular ya está sufriendo los daños de la batalla interna por el control del PP de Madrid. Las hostilidades abiertas entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso, tal como se pudo comprobar en los sondeos de la pasada semana, han laminado ligeramente los apoyos conseguidos por los conservadores en las encuestas. Por eso, El Mundo, pese a que su sondeo de este lunes da la victoria a los conservadores, pide a la fuerza de derechas que abandone esta “pueril” guerra para no tirar por tierra el “viento a favor”.

“La pueril batalla interna del Partido Popular en Madrid amenaza con frenar las expectativas electorales de la formación a escala nacional”, describe el editorial del diario El Mundo, al tiempo que subraya la “incredulidad” de la mayoría de sus electores, pues “no entienden que se alimentara y aireara la artificial pugna sin sentido” entre Díaz Ayuso y Martínez Almeida. Tampoco se comprende, según el medio de Unidad Editorial, que aún no se haya encontrado una “solución definitiva” que ponga fin a las hostilidades.

Recogen los datos del sondeo que ha elaborado Sigma Dos para El Mundo, que le dan la victoria al Partido Popular (29,1% y 130 escaños) ante un PSOE que empieza a desperezarse, impulsado por las cuitas internas de sus vecinos de la derecha. “Casado tendría en su mano ser el nuevo presidente del Gobierno con el apoyo de Vox […] pero se aprecia un estancamiento de los populares, que ven detenerse el ascenso ininterrumpido en el último año”, alertan desde el editorial.

De hecho, el resultado cosechado en la entrega de noviembre es el mismo que los de Pablo Casado obtenían el pasado mes de septiembre. Este “frenazo” tiene su explicación en esa batalla por el PP de Madrid que está dirigiendo al partido a “concentrar más energías en batallas orgánicas” que en avanzar hacia la “consolidación de un proyecto de futuro ilusionante”.

El Mundo califica la batalla interna como un “tiro en el pie” nada comprensible cuando, apoyándose en su encuesta, el 75% de los simpatizantes conservadores creen que Pablo Casado será el próximo presidente del Gobierno tras las siguientes generales. “Ello obliga a la dirección popular a un ejercicio de absoluta responsabilidad y a que no dilapide el viento a favor con absurdas polémicas que sólo benefician a la izquierda”, analizan en las páginas del rotativo.

Alertan a Casado de que no puede esperar “una victoria caída del cielo” si tira por tierra la “esperanza de renovación democrática” que desean, a su juicio, “tantos españoles”. Sujetándose en las declaraciones de Cayetana Álvarez de Toledo, advierten de que el “lamentable enjuague” para la repartición de los órganos constitucionales con PSOE y Unidas Podemos ha sido “totalmente contraproducente” para el PP en tanto en cuanto resulta “autoimpugnatorio”.