A Coruña ha acogido este miércoles la XXV Cumbre hispano-alemana liderada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el canciller alemán, Olaf Scholz. Un encuentro que ha servido para estrechar lazos y reforzar las relaciones entre ambos líderes, además de llegar a importantes puntos en materia energética y dar un toque de atención a Francia para consumar la creación del gasoducto MidCat antes del 2025.

En primer lugar, ambos dirigentes europeos han coincidido en su comparecencia ante los medios de comunicación que la falta de interconexiones entre los países europeos “impide aprovechar la capacidad gasificadora para Europa: “Es el único modo de conseguir un mercado energético europeo integrado, ha defendido Sánchez.

En sintonía, el canciller alemán ha reiterado en más de una ocasión su intención de “cooperar estrechamente para que bajen los precios de la energía”, siempre de forma “rápida y eficaz” para que den sus frutos en el futuro. “Debemos tener la garantía de una energía asequible para todos”, siendo este no solo un fin para Alemania, sino también con los Estados de Centro Europa.

Presiones a Francia por el MidCat

En aras de intentar construir un gasoducto que pase por la Península ibérica y Francia, Sánchez ha coincidido con Scholz en seguir presionando al mandatario francés para que acepte dicho operativo para alimentar de gas e hidrógeno verde al resto de los países del entorno. “De manera explícita” ambos dirigentes han llamado a abordar este debate y ensalzar la “cooperación energética” para lograrlo.  

"En un futuro, vamos a poder necesitar los gasoductos, son decisiones de largo alcance. Con los paquetes de subvenciones que lanzamos podemos intentar que bajen los precios en los mercados globales del petróleo y el gas, pero al mismo tiempo tenemos que velar porque no haya bajado suficiente para que los hogares lo puedan pagar porque aún siguen demasiado elevados", ha valorado el canciller.

Asimismo, Sánchez ha vuelto a poner de relieve las potenciales capacidades de España que podrían ser el fin de parte de las preocupaciones que ahora pesan sobre la cabeza de los líderes europeos en materia energética por las continuas amenazas de Putin. "En 2020 debíamos tener unas interconexiones del 10% y en 2030 el 15%. Estamos por debajo del 5%, más en el 3% que en el 4%. En un contexto internacional pacífico sería un elemento de preocupación, pero ahora España tiene una capacidad regasificadora que podríamos poner a disposición de Europa. Lo que pide España y Portugal es estar interconectados e integrados en el mercado energético, que es algo bueno para Europa. A todos los europeos nos daría más tranquilidad por tener más alternativas", ha defendido. Es así como el jefe del Ejecutivo español promociona la visión del país que podría convertirse, con el aval de la comunidad europea, en una “potencia exportadora limpia”, aunque la última decisión queda en manos de los Veintisiete.

En otro orden de ideas, y a pesar de las expectativas planteadas la noche del martes, en la reunión no se ha abordado el escudo antimisiles europeo que planteó Berlín, dado que este “no estaba en la agenda”.

Scholz rechaza el “tiempo del imperialismo” que promueve Putin

Con motivo de este escenario de incertidumbre, todas las miradas se redirigen a una misma persona: Vladimir Putin, artífice y propulsor de la situación actual. Es por ello que ambos líderes han vuelto a valorar la evolución de la guerra desde A Coruña: "Rusia ha sacudido el orden internacional basado en las reglas, estamos de acuerdo en que la soberanía de Ucrania es inviolable y la anexión de partes de Ucrania es contraria al Derecho Internacional, no tiene validez alguna para nosotros ni ningún valor. Alemania y España seguirán apoyando a Ucrania en su defensa contra Rusia. Representamos una Europa donde vale el respeto. El tiempo del imperialismo y las horas oscuras del siglo XX es algo que queremos dejar atrás", ha enfatizado el canciller.

A su tiempo, Sánchez ha puesto el acento en las atrocidades cometidas en Ucrania, donde ha acontecido, -aún a día de hoy- una masacre sin precedentes en el país contra la población civil: “Los bombardeos sobre la población civil son crímenes de guerra, esperemos que no queden impunes y que rindan cuentas ante la justicia", ha remarcado.

Capacidades europeas en materia de Defensa

Tal y como reza el documento que Sánchez y Scholz han firmado, el consenso se basa en fortalecer las capacidades en Defensa de los países europeos, así como la cooperación sobre armamento e industria. Dicha colaboración no solo se centraría en el ámbito bilateral entre ambas naciones, sino también “en el seno de la UE y la OTAN” para “garantizar la paz y seguridad de sus ciudadanos”. En la misma dirección, también han acordado poner sobre la mesa una Política Común de Seguridad y Defensa y a ejecutar la Brújula Estratégica a través de acciones concretas y colaborar en proyectos PESCO.