La dirección nacional del PP ha enviado una circular a sus diputados y senadores para que arropen este sábado en Toledo al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en un acto de balance de Legislatura y cumplimiento de programa electoral que Génova califica de "extraordinaria importancia" ante las elecciones del 20 de diciembre. Se trataría del primer acto de precampaña de Rajoy tras la peor semana que ha sufrido su partido en lo que va de Legislatura.

Cierre de filas tras el miércoles negro
Con este acto se intenta mostrar un cierre de filas de los populares después de una semana crítica tras la dimisión de la presidenta del PP vasco Arantza Quiroga; la entrevista del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en El Mundo criticando que haya "compañeros" que "se avergüencen" de ser del PP; las quejas del presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, por las decisiones del Gobierno; o el duro artículo de despedida de la diputada Cayetana Álvarez de Toledo titulado "No con este Presidente".

La circular va dirigida a los miembros de la Junta Directiva Nacional del PP y explica que en ese acto se quiere "dar cuenta del cumplimiento del programa electoral" con el que el PP se presentó a las pasadas elecciones generales del 2011.

"Un acto de extraordinaria importancia"
La circular toca a arrebato a los cargos del PP: "Como comprenderás, estamos ante un acto de extraordinaria importancia de cara a la próxima cita electoral del 20 de diciembre, por lo que contamos con su asistencia", asegura la circular que el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Fernández Maíllo, envió este miércoles a los dirigentes del partido.

Del Congreso a un ‘Cigarral’ de lujo
Este acto, que tendrá lugar en El Cigarral de las Mercedes de Toledo, se enmarca en la campaña del PP bajo el lema CumPPlimos con la que el partido quiere poner en valor el cumplimiento del programa electoral del 2011.

Básicamente va en la línea con el acto que tuvo lugar este miércoles en el Congreso de los Diputados, con la presencia de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría en la que se instó a los diputados a salir a la calle para dejar claro a los ciudadanos que en esta legislatura han dado "la vuelta a la tortilla". El acto se vio envuelto en la polémica porque se hizo en el Congreso de los Diputados, sede de la soberanía nacional, y por que el PP no reparó en gastos y hasta instaló un grifo de cerveza.