Semana decisiva para la reforma de la ley del solo sí es sí impulsada por el lado socialista del Gobierno. El PSOE quiere sacar adelante la modificación antes de mayo, mes en el que se celebran las elecciones autonómicas y municipales, para lo que se ha marcado un calendario cerrado que comienza este mismo lunes, con el fin de la prórroga para la presentación de enmiendas que aprobó el Congreso a finales de marzo. Así, tras la vuelta del parón por la Semana Santa, la Cámara Baja da comienzo a la cuenta atrás para la tramitación de la norma, que ha marcado un antes y un después en el seno de la coalición.

El socio mayoritario quiere que el Pleno dé su visto bueno al articulado el 20 de abril para que el Senado lo ratifique el 26. Todo sin acuerdo con los principales aliados. Finalmente Unidas Podemos se ha sumado a los socios y ha presentado enmiendas de forma individual aunque centrados en el mismo objetivo: ambas partes insisten en la necesidad de cambiar la definición de consentimiento que han puesto encima de la mesa los de Pedro Sánchez con su texto, para lo que han presentado sendas rectificaciones que tendrán que ser debatidas estos días sin visos de pacto entre los dos bloques.

El 'solo sí es sí' vuelve al Congreso

La vuelta al trabajo tras las pequeñas vacaciones por la Semana Santa se prevé movida, no solo por la cada vez más cercana campaña electoral de cara al 28 de mayo sino también por el calendario de iniciativas que se retoma. Uno de los asuntos clave que se afronta esta misma semana en el Congreso de los diputados es la reforma de la ley del solo sí es sí impulsada por el PSOE para modificar los efectos más lesivos de la norma primigenia, desarrollada por el Ministerio de Igualdad que dirige Irene Montero. El pasado 28 de marzo la Cámara Baja acordó una nueva prórroga -la tercera- para el plazo de enmiendas a instancias de los socialistas y tras otra petición anterior de ERC y EH Bildu para darse tiempo a negociar los términos de estos cambios, que ha abierto un cisma en la coalición. Un periodo que termina este lunes 10 de abril. Pero, con todo, los de Pedro Sánchez seguían manteniendo las fechas cerradas para sacar adelante esta modificación.

Así, los socialistas han fijado como máximo para finales de abril la aprobación definitiva del texto. "La tramitación tiene de plazo hasta el día 10 pero nuestra intención es aprobarla el día 20 en el Congreso", afirmó hace varias semanas en rueda de prensa el portavoz del PSOE, Patxi López, tras la confirmación de la ampliación de presentación de rectificaciones por parte de los grupos parlamentarios. Tal y como explicó, su pretensión es que ya este martes se debata a puerta cerrada en la Comisión de Justicia y se eleve a comisión del ramo el día 13 tras el visto bueno de los portavoces. Tras esto, el Pleno debatiría la propuesta el 20 y, de salir adelante, el 26 pasaría a la Cámara Alta para su aprobación definitiva. Todo con el objetivo de dejar cerrado este asunto de cara a las elecciones municipales y autonómicas. Pero en medio de este proceso se encuentra la acción del resto de formaciones, y es que los socios -véase EH Bildu y ERC- ya registraron enmiendas el pasado jueves mientras Unidas Podemos lo ha hecho a primera hora de este lunes, ya que el plazo finaliza a las 18:00 horas.

El PSOE y los socios, divididos

Con el calendario marcado, el interrogante se encuentra en el propio texto socialista y en las alianzas para sacar adelante una norma que pretende corregir los "efectos indeseados" de la ley de Montero. Más de un mes ha pasado desde que el pasado 7 de marzo el Pleno diera luz verde a la reforma del PSOE y desde entonces nada han avanzado los socios para alcanzar un acuerdo. Los morados insisten a su compañero de coalición que se aleje del Partido Popular y se acerque a ellos para llevar a cabo un texto conjunto que dé salida a esta polémica, pero nada parece indicar que esto se haya salvado en los últimos días.

Este mismo lunes, la ministra de Igualdad ha reiterado este mensaje, en el que ha manifestado una vez más la necesidad de cambiar la definición de consentimiento que -dice- han puesto encima de la mesa los de Sánchez en su nueva propuesta. "La mayoría de la investidura llevamos meses trabajando de forma coordinada, compartimos que hay que dar una respuesta ante las decisiones judiciales de rebajas de penas, pero también tenemos claro que el consentimiento tiene que seguir en el centro", ha sostenido Irene Montero durante una entrevista en La Hora de La 1, en la que además ha confirmado que ya han presentado enmiendas.

El escollo principal se encuentra, precisamente, en este aspecto ya que la reforma del PSOE vuelve a introducir la violencia y la intimidación como subtipos agravados para establecer las penas de prisión, un asunto que se ha convertido en la línea roja para Unidas Podemos. El partido de Ione Belarra considera que recuperar estos aspectos en el articulado supone someter a las víctimas a un "calvario probatorio" que deja a un lado el consentimiento, como sí preveía la ley que todavía sigue vigente. Los morados han llegado a sostener que esto implica "volver al Código Penal de la manada", unas declaraciones muy criticadas por los socialistas.

El consentimiento

"Hemos registrado enmiendas porque, pese a intentar hasta el último momento llegar a un acuerdo, es necesario mejorar la aplicación de la ley pero no retroceder ni degradar el sistema del consentimiento. Es básico llegar a este equilibrio y así lo han entendido también las fuerzas que sostienen la mayoría progresista y feminista. No hace falta ese retroceso que pretende el PP para mejorar la aplicación de la ley en los tribunales. Trabajamos por las mujeres y la infancia víctimas de violencias machistas", ha dicho Victoria Rosell, delegada del Gobierno Contra la Violencia de Género, ante los medios a las puertas del Congreso sobre las enmiendas que la formación mroada ha presentado individualmente a la Ley de Libertad Sexual. Unos cambios que, a juicio de Montero, "tienen que ser una oportunidad para que el PSOE se lo piense, para mejorar la ley y que esté trabajada con la mayoría feminista de la Cámara", ha dicho en la misma conversación televisada.

Entre tanto, ERC y EH Bildu -aliados principales de la investidura- fueron los primeros en dar un paso adelante y presentaron el pasado jueves más de una veintena de enmiendas, que se acercan más a las posturas de los morados. Así, proponen una nueva definición ampliada del consentimiento para precisar que no se pueda entender que lo hubo "por la ausencia de resistencia física o el silencio de la víctima, ni por su conducta sexual previa". A juicio de ambos grupos el redactado actual del PSOE "sigue cargando el peso en la actuación negativa de la mujer" por lo que piden que este concepto "tenga más incidencia en el aspecto probatorio que determina la impunidad de muchos procedimientos". Al mismo tiempo, también piden incluir la violencia y la intimidación como agravantes del delito y no como subtipos agravados para computar penas más altas. De hecho, apuestan por eliminar este apartado ya que "supone negar que la violación (artículo 179), ya es 'per sé' una forma de violencia, y afirmar que hay violaciones no violentas".

"Los cambios están en marcha"

Al otro lado, la portavoz del Gobierno y Ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, ha celebrado la presentación de mejoras por parte de los aliados y ha valorado "positivamente el trabajo de los grupos políticos" para reformar el solo sí es sí. "Hay que respetar todas las posiciones políticas y desde luego el trabajo de los grupos; el interés que nosotros teníamos es que se activara esa reforma y los cambios están en marcha para evitar los efectos no deseados de la ley", ha dicho en una entrevista en RNE en la mañana del lunes, antes de conocer las rectificaciones registradas por los morados. Con todo la ministra ha confiado en "dar cuanto antes" con "la solución para evitar lo que ha sido un problema que ha generado una alarma social". Para Rodríguez es, además, "importante" trasladar "tranquilidad a la ciudadanía" y culminar el trámite parlamentario, que ha comenzado la cuenta atrás esta misma semana.