El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, ha estado presente durante este martes y miércoles en el Comité de Política del Consumidor (CCP) de la OCDE celebrado en París y desde allí ha condenado el genocidio de Israel. Según han informado fuentes del Ministerio, Bustinduy se ha ausentado de las reuniones cuando el turno de intervención le tocaba a algún miembro del Gobierno israelí "en señal de protesta por los crímenes que ese gobierno está cometiendo en Palestina", lo que ha calificado como "genocidio de forma pública en numerosas ocasiones".
Concretamente, "ayer martes durante la intervención de Yaacov Zrihen, miembro de la misión Misión Económica y Comercial de Israel ante la OCDE. Y este miércoles ha vuelto a hacerlo durante la durante la intervención de Nir Barkat, ministro de Economía de Israel", han informado fuentes del Ministerio.
En el encuentro, Bustinduy ha defendido su apuesta por una normativa internacional que proteja los derechos de los consumidores. "Las normativas estatales son importantes, pero no suficientes. Necesitamos una normativa internacional, cooperación y una acción conjunta", ha señalado.
Al margen de ello, especial protagonismo ha tenido la transición climática sobre la que Bustinduy ha abogado por una próxima Ley de Consumo Sostenible aplicable en España para evitar fenómenos como el greenwashing o el ecoblanqueo. Por ello, la regulación solicitada pretende permitir "a las personas consumidoras tener información fiable y suficiente para tomar sus decisiones" y para evitar que la transición verde se traslade a un conjunto de normas que permitan reorientar los sistemas de producción, distribución y consumo, y caminar así hacia una economía "más sostenible y socialmente justa".
Relativo a los fraudes en diferentes sectores a nivel estatal, el ministro ha aprovechado su participación en el Comité para destacar "la experiencia pionera" que están "llevando a cabo en España en materia de regulación y de prevención de fraudes" en sectores como el transporte aéreo, el comercio electrónico, la publicidad encubierta en entornos digitales o las plataformas de alquiler de vivienda vacacional.
En paralelo a este tema, el debate sobre la migración también ha ocupado gran parte del encuentro en París. Así, este martes el ministro señaló que el debate europeo en esta materia sirve para alimentar los intereses de la ultraderecha y pidió evitar "ser rehén" del "discurso del miedo y del odio al que viene de fuera". "La reflexión a la que me lleva a mí la evolución del debate europeo sobre la migración es que se le está haciendo permanentemente el juego a la agenda de las fuerzas de ultraderecha", señaló.
En esta línea, lamentó también la deriva en la que se encuentra el Estado del Bienestar en diferentes países miembros donde "no se está hablando del problema de la vivienda, no se está hablando de los sistemas de protección social". Por esto mismo, añadió que "lo que corresponde a los partidos que sí defienden los derechos humanos y sí defienden los que han sido los principios básicos del Estado del Bienestar y la democracia es negarse a ser rehenes de esta operación que busca secuestrar la agenda pública para imponer un discurso del miedo y del odio hacia el que viene de fuera".