Mucho se criticó a la ministra de Defensa, Margarita Robles, cuando denunció que los cuerpos sin vida de ancianos en residencias de la Comunidad de Madrid permanecieron durante días sin que fueran retirados. Documentos oficiales confirman que la dantesca situación se produjo y que efectivos de los Bomberos también tuvieron que hacerse cargo de esta labor, además de la UME, para sacar a los fallecidos "que nadie recoge".
Más de tres días sin retirar los cuerpos
El Cuerpo de Bomberos retiró al menos 185 cadáveres en residencias de ancianos de la región. La situación era complicada, con las funerarias totalmente desbordadas y carencia de ataúdes. Según adelanta El País, a partir de formularios oficiales, los cuerpos de los mayores se acumulaban “desatendidos” incluso “36 horas o más” sin ser trasladados.
“Hay que priorizar la retirada de fallecidos que nadie recoge”, refleja uno de esos escritos, fechado el 27 de marzo. La Jefatura del Cuerpo de Bomberos firmo una nota interna que decía: “Os queríamos hacer llegar lo crítica que está siendo la situación de las residencias de ancianos en la comunidad”.
“Nos reportan desde Políticas Sociales que cuando el coronavirus entra en una residencia en pocos días tienen gran cantidad de infectados, si no todos, y un importante número de fallecidos”, sigue la nota. “De las 476 residencias de ancianos, hay gravemente afectadas 37 y otras 32 que estarán en este estado en pocos días. A esto se unen también algunas residencias de discapacitados (13 en estado crítico) que replican problemas casi idénticos”, se añade.
Ayuso dio la orden a los bomberos
El escrito de los Bomberos señala que “hemos recibido orden de la presidenta para que colaboremos con otros servicios para controlar esta desagradable situación priorizando la retirada de fallecidos que nadie recoge. Inicialmente requeriremos puntualmente la colaboración de voluntarios, pero lo trasladaremos en seguida a la guardia para que se desarrollen y resuelvan estas cuestiones de forma ordinaria”.
La situación de los ancianos en las residencias fue desesperada con los hospitales colapsados y la orden del Gobierno madrileño de que no se remitieran a los mayores más dependientes a los hospitales. La idea era medicalizar las residencias y que pudieran ser atendidos allí mismo, pero el plan chapucero de la Comunidad de Madrid, por el cual no ha asumido responsabilidades aún, no lo permitió.
Una media diaria de 23 cadáveres
Los bomberos se hicieron cargo de al menos 185 durante cuatro días infernales, entre el 4 y el 7 de abril, cuando recogieron una media diaria de 23 restos mortales en residencias. El esponsable del Sindicato de Bomberos federado en CSIT Unión Profesional, Israel Naveso, ha relatado que reclamó durante lo peor de la crisis que se movilizaran más recursos y bomberos en una situación que fue "un despropósito y una drama".
Los Bomberos de Las Rozas, de Leganés y Fuenlabrada participaron en la recogida de cadáveres de ancianos, dando prioridad a los cuerpos que llevaban desatendidos más de seis horas. Los parques de Aldea del Fresno, Coslada, Valdemoro o Tres Cantos se centraron en la desinfección e inspección de los centros y ambulancias.
