La Comunidad de Madrid dio orden a los hospitales, centros de salud y residencias de mayores para que los ancianos no fueran trasladados a los centros hospitalarios. Actualmente hay un centenar de casos investigados por la Fiscalía. Una conversación, cuya grabación desvela El Periódico de Catalunya, entre una médica y una hija a la que se negó la atención hospitalaria a su madre demuestra cómo se actuó en el momento más crítico de la epidemia.

"Un criterio ilógico"

En la conversación, la médica de la residencia, situada en Griñón (al sur de Madrid), explica a la hija de la anciana que "la Comunidad de Madrid tiene un criterio", que establece que "pueden ser trasladados a Urgencias todo aquel paciente que tenga infección respiratoreia o insuficiencia respiratoria", siempre que sea "una persona independiente" y que "no tenga patologías asociadas". Algo que la propia doctora califica de "ilógico porque no se puede esperar que una persona mayor de 80 años no tenga antecedentes".

"Duro, duro", subraya la médica, que insiste en que se trata de "un comunicado de la Comunidad de Madrid para todos los médicos de residencias, directores y personal de Enfermería".

La anciana requería un respirador

La médica explica a la hija de la enferma que se le están suministrando "antibióticos", a pesar de que un paciente en su situación requiere "conectarlo a un respirador", pero esto es algo que "se hace en la UCI" y "no hay respiradores ni para los jóvenes, y tampoco hay personal".

La anciana llevaba en ese estado desde el 11 de marzo y la conversación tuvo lugar el día 23. La residente murió 17 días después de la llamada telefónica, sin que se le hiciera ninguna prueba diagnóstica, aunque en la conversación la médico reconoce que lo más probable es que estuviera infectada por coronavirus.

Nuevas grabaciones desveladas por la SER de una conversación entre la hija de la anciana y el director de la residencia dejan constancia de que el protocolo de la Comunidad de Madrid era no derivar a los residentes al hospitral.

"No me dejan derivar a nadie"

El director del centro admitió que "no me dejan derivar a nadie. No vamos a pensar en esto porque todos querríamos que los derivaran y no es posible".

Ante la pregunta de la hija de si dejarían que los ancianos enfermos se murieran sin hacer nada, el responsable respondió que "como sé que no me van a dejar [llevar a la anciana al Hospital de Parla, que es es más cercano de la residencia], yo estoy buscando plaza en otros hospitales". Finalmente, la residente fue trasladada a la Jiménez Díaz, aunque ya demasiado tarde.

El abogado que lleva la denuncia ha explicado que reclaman a la Comunidad de Madrid un delito de homicidio imprudente y omisión del deber de socorro.