La senadora Pilar Barreiro se estrena este martes en su escaño del Grupo Mixtodeja de sentarse oficialmente entre los suyos, entre los senadores del Partido Popular.

Como ya ciera en su momento Rita Barberá, Barreiro ha dejado el PP pero ha decidido aferrarse a su asiento en el Senado para asegurarse el aforamiento. ¿Porque? Sencillo: la trama Púnica la señala, de hecho esta imputada en este macrocaso de corrupción.

La senadora murciana está acusada de varios delitos supuestamente cometidos cuando era alcaldesa de Cartagena (Murcia), en concreto los de fraude, falsificación de documentos, prevaricación y malversación, pero ella ha proclamado siempre su inocencia, razón por la cual, afirma, no ha renunciado a su escaño.

Una exigencia de Ciudadanos

Este martes hay pleno en el Senado y la expopular Barreiro se tendrá que sentar en el Grupo Mixto. Aunque asegura que decidió "libremente" el PP para evitar que la investigación judicial abierta contra ella por el caso Púnica se pudiera utilizar como "presión" al PP por parte de Ciudadanos, todo apunta a otra realidad.

Finalmente Ciudadanos apoyó los presupuestos de Mariano Rajoy para este 2018 pero, a cambio, tenían unas cuantas exigencias. Entre ellas, que la imputada Barreiro dejara de ser senadora del PP y cumplir con ello las condiciones del pacto de investidura entre Ciudadanos y Partido Popular.

Hay que recordar que la Fiscalía del Tribunal Supremo presentó la pasada semana un informe en el que pidió el sobreseimiento provisional de la causa contra la exalcaldesa de Cartagena "al no haber resultado debidamente justificada" la perpetración de los delitos de fraude, falsificación de documento mercantil, prevaricación, malversación de caudales públicos ycohecho que motivaron la apertura de la causa penal contra ella. 

En un tuit, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, da por buena la no dimisión, afirmando que su partido "siempre cumple".

Se considera inocente

Barreiro ha asistido a la primera reunión del Grupo Mixto de la Cámara Alta, donde se le ha adjudicado la portavocía de la Comisión de Entidades Locales, un cargo por el que según ha remarcado el portavoz de turno del grupo, Francisco Javier Alegre, de Ciudadanos, no va a mejorar la retribución económica que tenía en el grupo popular.

La senadora ha agradecido su acogida a los demás miembros del grupo, conformado ahora por ella y once senadores más de Ciudadanos, Compromís, EH-Bildu, Unión del Pueblo Navarro (UPN), Foro, Nueva Canarias, Agrupación Socialista Gomera y una exsenadora de Podemos.

Pilar Barreiro ha reconocido que su pase al Mixto responde a una situación "difícil y complicada" y ha reiterado que se marchó del grupo popular pese a que el pacto de investidura entre PP y Ciudadanos aludía al apartamiento de cargos sólo cuando la imputación judicial se transformara en juicio oral. Esto no sucede en su caso, puesto que según ha recordado sólo está investigada por el Tribunal Supremo y la Fiscalía ha pedido el archivo de la causa.

"He hecho lo que tenía que hacer, lo que consideraba que debía hacer y en ningún caso consideré dejar el acta de senadora porque yo estoy declarando mi inocencia desde el principio, desde el primer minuto", ha manifestado tras asistir a la reunión del Grupo Mixto.

Eso sí, Pilar Barreiro ha lamentado que existan "diferentes varas de medir" por parte de "toda la sociedad" hacia los políticos, algo que considera "doloroso" y que deriva en una situación de "injusticia clara y profunda". "Esta sociedad debe tomar un punto de cordura; establecer que el criterio de la presunción de inocencia sea siempre y para todos. No para unos sí y para otros no", ha reflexionado.