La pasada semana el Gobierno y sus principales socios, Ciudadanos, anunciaron un acuerdo cuasi-exprés para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado 2018. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha entregado este martes el proyecto a la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor. A pesar de la sintonía -tensa sintonía- entre el Partido Popular y los naranjas, los Presupuestos del Ejecutivo de Mariano Rajoy tienen poco recorrido ya que no cuentan con los apoyos suficientes y, salvo que algo cambie en el tablero político español (concretamente con respecto a Cataluña y el 155), los PGE están condenados al fracaso.
Mariano Rajoy logró salvar los Presupuestos en 2017 con los votos favorables de su partido y sus aliados UPN y Foro (137), a los que sumaron el ‘sí’ de sus socios de Ciudadanos (32), la diputada de Coalición Canaria Ana Oramas, el apoyo de Pedro Quevedo de Nueva Canarias y de los cinco del PNV.
En aquella ocasión, la aritmética parlamentaria sí daba, pero la reedición del concordato de los Presupuestos 2017 no es posible a corto plazo. El PNV se muestra reticente a apoyar el proyecto del PP hasta que no se levante el 155 en Cataluña, lo que no ocurrirá hasta que las mayorías parlamentarias del Parlament articulen un Govern. Entretanto, Montoro deberá negociar con Oramas y Quevedo. El diputado de Nueva Canarias rubricó una alianza electoral con el PSOE, pero Pedro Sánchez aseguró que “puede defender los intereses que considere” porque “firmamos un acuerdo de investidura” que no salió adelante y “las coaliciones electorales se establecen cuando hay elecciones, hasta ese momento, nada que añadir”.
El foco, por tanto, está en el PNV. Los de Aitor Esteban son claros y tajantes: no apoyarán los Presupuestos mientras se mantenga el 155. Por este motivo, según publica El Independiente, Montoro estaría barajando retrasar el debate de los Presupuestos para que, durante ese lapso de tiempo, el independentismo pacte un Govern y se levante el 155, con el presuntamente consecuente apoyo del PNV. El debate sobre los PGE estaría previsto para los días 25 y 26 de abril, pero podría celebrarse finalmente en la primera quincena de mayo.
Por si las moscas, dirigentes del Partido Popular hacen un llamamiento a la “responsabilidad” para aprobar los Presupuestos. El vicesecretario de Política Social y Sectorial del PP, Javier Maroto, pidió “cinco votos al azar” al PSOE para aprobar los Presupuestos. Unas palabras que chocaron frontalmente con una tajante respuesta de Sánchez: “Somos un partido serio. Nada de frivolidades”.
Una vez más, los PGE dependen de cómo transcurran los hechos en Cataluña y de la capacidad de seducción del Gobierno y, concretamente, de Rajoy y Montoro. Se barrunta naufragio.
