El juez Juan Carlos Peinado no cede. Ni ante las advertencias reiteradas de la Audiencia Provincial de Madrid ni ante los recursos presentados por la Fiscalía y la defensa. El magistrado que instruye la causa abierta contra Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vuelto a insistir en mantener viva la línea de investigación que vincula a Gómez con el rescate de Air Europa durante la pandemia. Lo ha hecho esta semana con una resolución en la que rechaza los recursos presentados contra su decisión de seguir adelante con esa parte del sumario, escudándose en lo que califica como “hechos nuevos”, aunque su principal fuente es un informe de la Guardia Civil aparecido en el marco del caso Ábalos y divulgado a través de los medios de comunicación.
Peinado, que lleva más de un año con Gómez imputada, no oculta su malestar con el Ministerio Fiscal, al que acusa sin rodeos de querer ignorar lo que considera evidente. En el auto, cargado de reproches, el juez arremete contra la Fiscalía por intentar “practicar la técnica del avestruz” y afirma que “parece no querer estar en el mundo en el que vivimos todos los españoles”. Asegura además que “no es caprichoso buscar posibles hechos delictivos” y que sería ingenuo no investigar cuando, a su juicio, los indicios están siendo divulgados “por todos los medios de comunicación de todo tipo”. Una afirmación que sirve de base argumental para su decisión, pese a que hasta ahora la Audiencia de Madrid ha sostenido que esa línea debe descartarse por falta de indicios objetivos.
Las criticas rodean la actuación del magistrado. Los últimos días se ha empezado ha decir que el ‘caso Gómez’ puede acabar convirtiéndose en el ‘caso Peinado’. El ministro de Transformación Digital, Óscar López, ha sido una de las voces más críticas con las extralimitaciones del juez. En una última publicación a través de su cuenta en la red social X, López adjuntaba la definición de la RAE de la palabra “prevaricación”, en referencia a la insistencia del juez en mantener abierta una investigación que lleva meses en un punto muerto.
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— Oscar López Agueda (@oscarlopeztwit) May 6, 2025
La causa contra Gómez se inició a partir de una denuncia del colectivo ultraconservador Manos Limpias, que la acusó de delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Desde entonces, el sumario ha ido creciendo en direcciones diversas. Una de las más polémicas ha sido la que apunta a su relación con el rescate a Air Europa, que se aprobó en 2020 con fondos de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en pleno contexto de la pandemia. Peinado ha puesto el foco en la vinculación entre Gómez y Javier Hidalgo, entonces CEO de Globalia, el grupo propietario de Air Europa. Pero en dos ocasiones, la Audiencia Provincial le ha ordenado dejar esa línea de lado por considerar que se basa únicamente en conjeturas.
Pese a eso, el juez ha seguido adelante. En marzo, intentó justificar su empeño en un escrito en el que se acogía a una frase de la propia Audiencia: “en tanto en cuanto no aparezcan hechos verdaderamente nuevos de contenido incriminatorio valorados en resolución judicial motivada”. A partir de esa frase, Peinado solicitó a la Guardia Civil un nuevo informe con el que pretende acreditar que sí hay elementos nuevos para reabrir esa línea. La Fiscalía y la defensa respondieron con recursos acusando al juez de emprender una investigación prospectiva, es decir, iniciar una causa sin base sólida con la esperanza de que algo aparezca.
El magistrado, sin embargo, sostiene que esos nuevos hechos existen. Y cita como prueba un informe policial conocido el 9 de abril, en el contexto del caso que investiga al exministro socialista José Luis Ábalos en el Tribunal Supremo. En dicho informe, los agentes recogen una conversación entre el comisionista Víctor de Aldama y Koldo García, entonces asesor de Ábalos, en la que se afirma que Javier Hidalgo “está muy jodido” y que “acaba de llamar a Begoña”. El documento no especifica si se refiere a Gómez ni si esa supuesta llamada tuvo alguna relevancia práctica en la tramitación del rescate, pero Peinado lo considera suficiente.
Después de que ese informe se hiciera público, Air Europa emitió un comunicado oficial en el que negó categóricamente que hubiera pedido la intervención de Begoña Gómez en la gestión del rescate. “La gestión de esos trámites se realizó siguiendo en todo momento los cauces establecidos y respetando la normativa vigente”, afirmaron desde la compañía. Pese a ello, el juez insiste en que “es notorio y público” que la investigación de la Guardia Civil en torno a Air Europa ha arrojado datos que justifican seguir investigando, aunque provengan de una causa distinta.
Peinado escribe que “no es capricho buscar posibles hechos delictivos”. Y añade un ejemplo: un artículo publicado el 10 de abril por el diario El Mundo, “del que no se puede afirmar que tenga una concreta afinidad ideológica a ningún específico partido político”, en el que se detallan las referencias a Gómez en el sumario del caso Ábalos.
En la resolución, Peinado también vuelve a cargar contra el abogado de Begoña Gómez, el exministro socialista Antonio Camacho. El magistrado, que ya lo multó con 5.000 euros por hacer declaraciones a los medios, le reprocha ahora que haya presentado su recurso un día después que la Fiscalía, algo que califica de “nada frecuente”. El auto apenas dedica unas líneas a refutar los argumentos de Camacho, pero se extiende ampliamente en descalificaciones personales y profesionales: “El recurso del letrado, de una extensión sensiblemente inferior a la del recurso del Ministerio Fiscal, no se sabe si porque considera que sus argumentos son menos sólidos o porque confía en que, una vez más, sea el Ministerio Fiscal quien, de una manera más intensa e incluso más brillante desde el punto de vista técnico jurídico, efectúe una defensa de los intereses de la investigada”.
Peinado concluye que él no está formalmente investigando nada, ya que no ha citado a declarar a nadie, aunque sí ha solicitado numerosa documentación tanto a la SEPI como a la Guardia Civil. En su opinión, el hecho de que existan referencias indirectas a Gómez en otros sumarios justifica que mantenga abierta esta línea, pese a la oposición de las partes y a las advertencias de la Audiencia. Para el magistrado, seguir investigando es casi una obligación moral ante lo que considera una evidencia socialmente compartida: “Toda la opinión pública conoce lo que se está siendo transmitido por todos los medios de comunicación social”.
La investigación sigue, con una lista de imputados que incluye, además de Begoña Gómez, a su asesora Cristina Álvarez, al delegado del Gobierno en Madrid Francisco Martín Aguirre, al directivo Juan José Güemes y al empresario Juan Carlos Barrabés. Todos ellos, por motivos distintos, forman parte de un sumario que sigue creciendo mientras la Fiscalía y la Audiencia intentan marcarle límites al juez instructor. Peinado, por ahora, no parece dispuesto a asumirlos.