Hubo una época en la que Mariano Rajoy y Albert Rivera formaban un tándem idílico, una pareja de fantasía, una dupla de cuento de hadas. La rúbrica del pacto de investidura permitió al presidente del Gobierno pasearse por España alardeando de sus dotes de negociación para lograr ser investido, mientras el líder de Ciudadanos se vanagloriaba de ser un hombre de estado que consiguió arrancar 150 compromisos al Partido Popular. Pero algo cambió. El debate territorial precipitó todo. La relación entre los naranjas y los populares se fracturó fruto del auge de Ciudadanos en las encuestas  y el descalabro del PP el 21D. Rivera se ve en La Moncloa y, como parte de la estrategia por conquistar la derecha del tablero político, ha abandonado al PP a su suerte y ha dejado de solicitar el aplazamiento de los plazos para presentar enmiendas a iniciativas que tumban los buques insignias populares, como la Ley Mordaza, que tiene sus días contados.

Ciudadanos y PP tenían secuestradas varias iniciativas en la Mesa del Congreso. Ahora, los naranjas dejan caer la Ley Mordaza de los 'populares'

La Mesa del Congreso, donde PP y Ciudadanos tienen mayoría (suman cinco de sus nueves miembros), pueden prorrogar de forma indefinida el plazo de enmiendas a las proposiciones, de tal manera que pueden quedar en el limbo por un bloqueo eterno. Hasta ahora, los naranjas apoyaban a los populares y, pinza mediante, dilataban los plazos con la excusa de necesitar más tiempo para presentar sus enmiendas. Así, desde que la oposición iniciara en marzo de 2017 la caída de la Ley de Seguridad Ciudadana -más conocida como la Ley Mordaza-, la Mesa la tenía secuestrada. Sin embargo, coincidiendo casualmente con la guerra declarada entre Rivera y Rajoy, los naranjas han abandonado al PP y este martes será el último día para presentar enmiendas al nuevo texto legislativo que la sustituirá.

El Partido Popular impuso la Ley Mordaza a golpe de mayoría absoluta e hizo de ella uno de sus buques insignia. La pregunta es: ¿Ciudadanos ha dejado caer la Ley Mordaza a propósito o se trata de una perfecta coincidencia? Fuentes cercanas a la Comisión de Interior señalan que por ahí van los tiros, y añaden: “Ahora dirán en Ciudadanos que ellos han desbloqueado la parálisis política”.

Y es que, la pinza de la derecha mantiene en stand by otras muchas iniciativas, como la subida del salario mínimo, la Proposición de Ley de medidas de protección de consumidores vulnerables de gas natural o la Proposición de Ley de rectificación registral de las personas transexuales.

Pablo Echenique, secretario de Organización de Podemos, ha mencionado que se trata de un “desbloqueo selectivo”, insistiendo en que Ciudadanos ha propiciado el hundimiento de la Ley Mordaza como parte de su estrategia.

A parte del día 28 de febrero no se admitirán más enmiendas. La comisión nombrará una ponencia que elaborará un informe que, a su vez, será aprobado por la comisión para su posterior debate y aprobación en el pleno.

Ataque y contraataque

El 21D en Catalunya ha marcado un antes y un después en el devenir de la política española. Un punto de inflexión que puede subvertir el sentido hegemónico del Partido Popular. Los de Mariano Rajoy aseguran que “una cosa son las autonómicas y otras las generales”, pero las encuestas insisten en rebatir a los populares: Ciudadanos gana terreno hasta el punto de que, de celebrarse comicios estatales, sería la primera vez desde 1982 que el bipartidismo no consigue la primera plaza. Ambos partidos pugnan ahora por erigirse como el buque insignia de la derecha española. A raíz del debate territorial, el conservadurismo se ha adueñado de la sociedad en detrimento del socialismo, y la opción liberal también gana enteros, según el CIS. Ciudadanos se lleva los votos liberales y el PP los conservadores, ambas opciones crecen, pero de manera desigual. En consecuencia, si Ciudadanos quiere sorpassear a los populares, no basta con recoger el voto de los liberales, sino que debe robar voto conservador al PP. ¿Cómo? Explotando la mancha más negra del PP: la corrupción.

Albert Rivera comenzó a arremeter con especial dureza contra el PP con motivo de la corrupción. ¿Y cómo respondió el PP? Contraatacando con lo mismo. Los populares, sin pudor alguno, reprocharon las irregularidades que el Tribunal de Cuentas evidenció sobre la financiación de Ciudadanos. De hecho, el PP preparó dos sesiones monográficas en la comisión de investigación de la financiación de partidos en el Senado, un órgano que, valiéndose de su mayoría absoluta, ha utilizado sistemáticamente de manera interesada.

El Partido Popular se revolvió y Ciudadanos ha reaccionando desbloqueando las iniciativas parlamentarias que habían quedado en el limbo y, de facto, dejando caer uno de los buques insignia legislativos del Gobierno de Rajoy: la Ley Mordaza.