La fobia contra el dirigente de IU, Alberto Garzón y de paso contra su esposa, se ha convertido ya en una especie de enfermedad obsesiva, demencial y febril. Antes de celebrar su boda, determinados medios calentaron el ambiente intentando convertir una boda propia de dos personas de clase media, en todo un bodorrio de lujo casi comparable con los de los miembros de esa España casposa y de alta alcurnia que organizan sus celebraciones en monasterios Patrimonio del Estado o en exclusívísímas instalaciones de la jet set de afamadas y lujosas denominaciones.

Una boda moderna preparada por la pareja
Según testigos asistentes a la celebración del matrimonio Garzón, la boda, oficiada en un pequeño municipio de La Rioja (donde está enterrada la madre del líder de IU, y donde él mismo vivió años de su infancia) y festejada en unas bodegas riojanas donde habitualmente se organizan este tipo de actos, fue un ejemplo de organización muy personal de los propios novios y sobre todo divertida, muy divertida. Lo del lujo y los oropeles "impropios de un comunista" son aportación malvada de mentes ultras o envidiosos conservadores. Fue "una boda moderna con detalles aportados por una pareja joven y creativa". Así es como nos la definen asistentes al acto.

Ahora toca cargar contra el viaje de novios
Pero la caverna no se rinde. Esa misma caverna que elogió, e incluso asistió, a la celebración matrimonial que tal vez haya tenido más corruptos por metro cuadrado -la boda de la hija de Aznar y Alejandro Agar en el Monasterio de El Escorial-, carga de nuevo contra el matrimonio Anna Ruiz y Alberto Garzón. Ahora lo hacen a cuento de su viaje de novios. Como tantas parejas tras la boda, aunque con un poco de retraso por compromisos laborales, los contrayentes emprenden su "luna de miel". El lugar elegido es un destino muy original: Nueva Zelanda. Y precisamente ello le ha servido de excusa al habitual equipo mediático cavernícola para atacar duramente a la pareja. 

Desconocimiento geográfico de la caverna
En un ejercicio de cinismo y de desconocimiento de geografía económica censuran que el destino turístico elegido sea Nueva Zelanda, "uno de los países más capitalistas y liberales del mundo". Habría que decir que la inmensa mayoría de los países se hallan en lo que podemos denominar la zona capitalista o del libre mercado, unos más avanzados y redistributivos y otros menos, con lo cual la elección de un país de esta órbita es fácil que se produzca. Y por otro lado, categorizar como el país "más capitalista de todos" es un auténtico "descubrimiento" de geografía económica que hasta el momento se desconocía en los manuales y libros.

Criticar que sea un país muy "liberal", o sea democrático, pues parece más un elogio a la elección que un motivo de mofa o crítica. La pregunta que cabe hacerse es qué campaña y de qué brutales dimensiones hubiera montado esta caterva ultra si la pareja hubiese elegido, con todo su derecho de selección de destino turístico, países como China, Cuba, Corea del Norte y no digamos Venezuela. Precisamente las pullas han venido de nuevo por los lugares comunes de ser Garzón un político "muy comunista", que "disfruta del lujo" vacacional tras una boda de "alto copete" y que "no reparó en gastos". Falso de toda falsedad. Paradójicamente son budas críticas emanadas de quienes suelen pasarse la vida entre restaurantes de alto nivel en comidas, con miembros del Ibex 35, comiendo de "gañote" y que tienen a sus hijos en elitistas colegios privados en el extranjero, en países muy "capitalistas y liberales" precisamente.

Grave y grosera acusación de "chekista"
Pero lo que parece vergonzoso es que a estas alturas del siglo XXI en España haya quien libérrimamente, y a propósito de estas noticias sobre el viaje de novios de Alberto Garzón, lo tilde de "chekista y sectario" que "salta de las barricadas a las mariscadas". Un calificativo más que grosero, anacrónico e injurioso que delata la ignorancia y malignidad de quien lo escribe. Hablar de actuales checas y de contemporáneos responsables de éstas es para preocuparse seriamente por el estado de un sector del periodismo en España.

De hábitos sencillos y amigos de siempre
Ignoran los ilustrados de la caverna y caterva troglodita que la pareja, según fuentes recabadas de su ámbito de amistades, representan a lo más parecido a muchos de los jóvenes profesionales actuales dotados de compromiso. Son sencillos en sus hábitos y aficiones: lectura, música, cine y muy de disfrutar de esos placeres en su casa. Son alegres y muy normales en sus relaciones. Austeros en los gastos y alejados de lo superficialmente material y lujoso. Conservan los mismos amigos con los que suelen verse y disfrutan en torno a unas cañas en bares normales y sencillos de Madrid o en Málaga cuando acontece la escapada. Anna, médica del hospital público de "La Princesa", suele ir a conferencias y charlas de cáracter cultural y solidario. Él tiene una agenda de reuniones de su labor parlamentaria y orgánica muy intensa.También hacen algún encuentro festivo esporádicamente en su casa, antes en el barrio de La latina y ahora en el municipio de Rivas. Una gran afición les une a ambos: conocer otros países y viajar. Y ello, con sus ahorros y juntos, se disponen a hacerlo, ahora en Nueva Zelanda y en un futuro... donde les dé la gana. Buen viaje.