El otoño transforma los paisajes de la Comunidad de Madrid, llenando los bosques de colores vibrantes y abriendo la esperada temporada de recogida de setas. Para muchos, este es el mejor momento para disfrutar de la naturaleza, participar en la caza de hongos y pasar un día al aire libre rodeados de amigos y familia. Los campos, bosques e incluso jardines se convierten en terreno fértil para setas como los níscalos o el ansiado Boletus edulis

Sin embargo, a diferencia de otras regiones de España, como Soria, Huesca o Cataluña, la Comunidad de Madrid no es famosa por su riqueza micológica, pero eso no quiere decir que no exista. De hecho, la menor fama de Madrid para buscar setas ayuda a que nos encontremos zonas menos conocidas, sin tanta afluencia de otros buscadores de setas, pero con iguales o mejores hongos a nuestro alcance. Solo hay que saber los secretos de dónde buscar setas en Madrid.

Si decides adentrarte en este mundo por prinmera vez, es importante conocer ciertos consejos para la recolección y estar bien preparado:

  • Utiliza una cesta para que las esporas de las setas puedan caer mientras caminas y así contribuyes a su reproducción.
  • Lleva una navaja especial para setas para cortar los ejemplares correctamente y evitar daños innecesarios.
  • Vístete con ropa adecuada: impermeable y calzado cómodo para caminar por el bosque.
  • Consulta guías especializadas o aplica una app para identificar setas venenosas o peligrosas.

¿Dónde encontrar más información sobre setas?

Si eres un aficionado a la micología o te estás iniciando en esta práctica, te recomendamos que visites algunos de los siguientes recursos para obtener información especializada:

¿Qué terrenos son más favorables para encontrar setas?

El tipo de suelo y la flora son determinantes a la hora de encontrar setas. En general, los terrenos húmedos y ricos en materia orgánica favorecen el crecimiento de hongos, pero algunos factores adicionales a tener en cuenta son:

  • Suelos calizos o ácidos: Los suelos con un alto contenido de materia orgánica, sobre todo aquellos con pH ácido o ligeramente alcalino, son los más adecuados para la mayoría de las especies comestibles.
  • Orientación geográfica: Las laderas orientadas al norte suelen ser más frescas y mantener la humedad durante más tiempo, lo que favorece el crecimiento de setas. Evita las zonas demasiado soleadas o con viento fuerte. En las webs de los Ayuntamientos de los rincones que te vamos a desvelar sueles encontrar mapas geográficos del término municipal que te pueden ayudar a conocer la orientación de los terrenos.
  • Inclinación del terreno: Esos mismos mapas suelen incluir una visualización de la altura sobre el nivel del mar, que te puede ayudar a localizar terrenos con una inclinación media. Una inclinación muy acentuada suele significar que el agua de las lluvias pasa de manera rápida y torrencial, sin permeabilizar el terreno y arrastrando esporas y vegetación. Una inclinación muy plana puede traducirse en una excesiva captación de humedad. 
  • Tipo de vegetación: Los bosques de robles, hayas, pinos y encinas son ideales, ya que las setas suelen crecer en simbiosis con estos árboles. Las zonas con abundante musgo y hojas caídas también son buenos indicadores.

En la Comunidad de Madrid, hay muchas zonas ideales para la búsqueda de setas. Aquí te mostramos los mejores lugares para disfrutar de esta actividad.

Imagen de la Sierra de Guadarrama. Comunidad de Madrid

 

Puerto de la Fuenfría

El Puerto de la Fuenfría, que atraviesa la Sierra de Guadarrama y conecta Segovia con Madrid, es un lugar ideal para recolectar boletus, setas de cardo y níscalos. Ubicado a una altitud de 1.800 metros, se encuentra entre la Sierra de La Mujer Muerta y Siete Picos. A pesar de su altura, es un área fácilmente accesible para caminatas, ya que forma parte del Camino de Santiago de Madrid.

Este paso montañoso tiene una historia que se remonta a la época romana, cuando construyeron una calzada para conectar ambos lados de la sierra. Esta calzada va desde Las Dehesas de Cercedilla hasta Segovia. Además de poder caminar por sendas frecuentadas por montañeros, también es posible recorrer la calzada romana, la Carretera de la República y la pista forestal conocida como La Calle Alta.

Alameda del Valle

En pleno corazón del Parque Nacional del Guadarrama, se encuentran pueblos pintorescos como Alameda del Valle. En sus pinares y bosques, las setas crecen abundantemente, y a pesar de su ubicación en una zona montañosa y elevada, es de fácil acceso tanto por carretera como en transporte público.

Para quienes prefieren el transporte público desde Madrid, la opción más sencilla es tomar la línea 194 de autobuses desde el intercambiador de Plaza Castilla. Aquí puedes consultar los horarios de los trayectos Madrid – Rascafría y Rascafría – Madrid.

Dos cestas de mimbre cargadas de setas de níscalos.

Puerto de Canencia

Cada fin de semana, numerosos aficionados a la recolección de setas se reúnen en este rincón del Valle del Lozoya, donde los robledales y pinares ofrecen un entorno ideal para la micología, con una gran variedad de especies disponibles.

El recorrido más sencillo y bien señalizado comienza en el área recreativa situada en el puerto, a 1.524 metros de altitud. A lo largo del camino, se cruzará el arroyo del Sestil entre paisajes de pinos, robles y abedules.

Es una ruta lineal y accesible, perfecta para hacer con niños, ya que no presenta grandes dificultades. El trayecto completo abarca 6,5 kilómetros y se puede realizar en unas 2 horas.

Valle de El Paular

El Valle de El Paular es otro enclave destacado para quienes buscan níscalos y setas de champiñones silvestres. Ubicado cerca de Rascafría, El Paular no solo es famoso por sus impresionantes rutas de senderismo, su monasterio y el antiguo molino de papel, sino también por ser un paraíso para los amantes de las setas. No obstante, es importante tener precaución, ya que entre la variedad de hongos que crecen en la zona, algunos pueden ser peligrosos e incluso mortales.

Este Parque Nacional ofrece numerosas rutas de senderismo, muchas de las cuales son ideales para hacer en familia, ya que no presentan grandes desniveles ni dificultades. Así, la búsqueda de níscalos puede convertirse en una actividad amena y segura para disfrutar con los más pequeños.

Imagen de la Sierra de Guadarrama. Comunidad de Madrid (1)

Alto de Navahonda

Otra hermosa zona, repleta de encantadores rincones, es muy apreciada por los aficionados que aprovechan los fines de semana para salir a buscar setas.

Esta ruta, que comienza desde la Ermita, es igualmente sencilla. El recorrido está bien señalizado y delimitado, lo que permite realizarla en cualquier época del año. Con una longitud de 6,5 kilómetros, presenta un desnivel que varía entre 860 y 1.039 metros. El trayecto tiene una duración aproximada de dos horas de ida y otras dos de vuelta.

Monte Abantos

Perteneciente a Guadarrama, este monte en el término de San Lorenzo del Escorial se llena de amantes de la micología en otoño. Algunas de las especies que se pueden encontrar son boletus, senderuelas, setas de cardo o setas pie azul.

Esta ruta es una de las más conocidas por los amantes del senderismo en Madrid. El pico Abantos es accesible para los más noveles, y su nombre recoge la gran proliferación del ave rapaz abanto, muy frecuentado en esta zona.

Cercedilla

Cercedilla, que delimita las provincias de Segovia y Madrid, se destaca por su elevada altitud y abundante vegetación, factores que, combinados con la humedad, lo convierten en un lugar ideal para los recolectores de setas.

Cada año, se celebran en Cercedilla las Jornadas Micológicas, una excelente oportunidad para los principiantes. Estas jornadas enseñan a recoger setas de manera sostenible, a distinguir entre las comestibles y las peligrosas, y a disfrutar de una experiencia única en la naturaleza.

Si la recolección no resulta tan fructífera como esperabas, los restaurantes locales ofrecen la posibilidad de disfrutar de deliciosos platos elaborados con setas de la región.

Puerto de los Leones

El Puerto de los Leones, en Madrid, es otro destino popular para los recolectores de setas, en especial para quienes buscan níscalos y boletus edulis. Ubicado en el extremo occidental de la Sierra de Guadarrama, cerca del municipio de Peguerinos, en Ávila, esta zona está repleta de bosques, lo que favorece la proliferación de setas.

Este puerto tiene una importancia histórica que se remonta a la época romana y se encuentra a una altitud de 1.511 metros. También es conocido como el Alto del León debido a la estatua de un león de piedra que se erige en su cima desde el siglo XVIII.

Valle de La Barranca

El Valle de La Barranca, a las faldas de la Bola del Mundo, es un lugar idóneo para buscar amanitas, níscalos y boletus. Situado en el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, este valle es perfecto tanto para senderistas como para recolectores de setas, con rutas que se adaptan a todos los niveles.

Consejos para la recolección de setas

Es fundamental que, antes de salir a buscar setas, te informes adecuadamente sobre las especies comestibles y las tóxicas. Lleva siempre una guía micológica o una app especializada para asegurarte de no recoger setas peligrosas. Además, recuerda:

  • No arranques las setas, córtalas cuidadosamente por el pie para no dañar el micelio.
  • Respeta las normas locales sobre la recolección y el acceso a terrenos privados.

Legislación y permisos para la recolección de setas en Madrid

En la Comunidad de Madrid, la recolección de setas está regulada para proteger los ecosistemas y garantizar una actividad sostenible. No es necesario un permiso específico para la recolección de setas en la mayoría de los terrenos públicos, pero hay zonas protegidas donde está prohibido recolectar, como el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama o áreas de conservación especial. En cuanto a la cantidad, la legislación establece un límite de hasta 3 kg por persona y día para evitar la sobreexplotación de los recursos. Además, está prohibido usar herramientas que dañen el suelo o el micelio, y siempre es importante respetar la naturaleza, dejando los ejemplares que no conozcamos o que sean tóxicos.

Para recolectar en terrenos privados, es imprescindible contar con la autorización del propietario. Además, algunas localidades han desarrollado normativas específicas que pueden requerir permisos municipales, por lo que siempre es recomendable informarse en los ayuntamientos locales antes de planificar la salida al campo.

boton whatsapp 600