El desayuno es la primera comida que ingerimos a lo largo de la jornada y la que nos proporciona la energía y los nutrientes necesarios para arrancar, por lo que es comúnmente conocida como “la más importante del día”. Sin embargo, dicha coletilla no aplica para todo el mundo: mientras que algunas personas se despiertan con mucha hambre y hacen desayunos copiosos, otras no tienen apetito a primera hora y prefieren almorzar algo más tarde. La gastronomía española es muy variada también en el desayuno y las opciones son muy amplias: cereales, galletas, fruta, tostadas, churros...

Por otro lado, encontramos los desayunos de los hoteles: dulce y salado, huevos fritos con bacon o tortilla francesa, tostadas con distintos tipos de pan, yogures, croissant, ensaimadas, napolitanas y un largo etcétera. Las opciones y combinaciones con las que contamos son prácticamente infinitas. Sin embargo, no todas son igual de recomendables ni tienen el mismo efecto en todos los cuerpos, por lo que es conveniente saber qué alimentos no son aconsejables de consumir si nos encontramos en ayunas.

En primer lugar, encontramos las bebidas carbonatadas. Es cierto que su consumo a primera hora de la mañana no es común, pero es conveniente puntualizar que hacerlo favorece la producción de ácido clorhídrico en el estómago. Continuando con los líquidos, tampoco se recomienda consumir café o té con el estómago vacío, sobre todo para personas que tienen problemas de acidez de estómago, ya que favorecen la producción de ácido gástrico.

Dos hortalizas prohibidas

De nuevo por secreción de ácido y pasando a los sólidos, la bollería industrial no se recomienda para consumir con el estómago vacío. Por otro lado, los hidratos de carbono refinados (presentes en productos como el pan blanco o el arroz), se desaconsejan en ayunas. Se trata de alimentos que suben fácilmente tanto la insulina como la glucosa y que tras su consumo terminan provocando una sensación de hambre mayor. Por su parte, las especias tampoco son recomendables, ya que irritan la mucosa y favorecen la producción de jugos gástricos, que pueden derivar en enfermedades en el tracto digestivo.

Por último, dos hortalizas se cuelan en la lista de alimentos ‘prohibidos’ por la mañana: el tomate y el pepino. Pese a ser dos alimentos con múltiples beneficios y que deben estar incluidos en nuestra dieta, en ayunas no resultan tan favorables como en otros momentos. En el caso del tomate, por sus altos niveles de ácido, que al entrar en contacto con nuestros jugos gástricos puede derivar en úlceras. En cuanto al pepino, su consumo a primera hora del día está asociado al malestar de estómago y al exceso de gases.