La frutas y verduras y muchos otros alimentos naturales, llevan su propio envase. Aún así, y por motivos que van desde la conservación a la presentación comercial, nos empeñamos en meterlos dentro de elementos plásticos. Más contaminación y esta podría evitarse fácilmente.
Nuevo mundo
Son muchos ya los comercios que se han apuntado a la iniciativa de “comida desnuda” como se está empezando a conocer esta práctica. Uno de ellos es un supermercado de Nueva Zelanda que además ha comprobado el efecto que tiene esta práctica.
Aunque en principio fue una iniciativa para reducir los envases plásticos, la idea de la cadena de supers New World ha tenido unos resultados inesperados. Ahora venden mucha más fruta y verdura. La razón es lógica.
Los compradores ahora no solo pueden ven los producto s tal cual son. También pueden tocarlos y olerlos. Volver, como dicen muchos de ellos, a recuperar sensaciones de la niñez. Y ya se sabe que es impulso es irresistible a la hora de comprar.
Esperaban pérdidas
Los primeros sorprendidos fueron los responsables del supermercado. De hecho, habían admitido sufrir pérdidas de ventas por la decisión de eliminar los envases. Y saben de lo que hablan, dado que el supermercado eliminó también las bolsas, los plásticos de un solo uso hace tiempo.
Pero ha sido al contrario. Según los responsables ha sido la primera iniciativa con impacto positivo e inmediato en las ventas que han visto en 30 años en el negocio.
Y es que cualquier idea es bienvenida para tratar de reducir los 300 millones de toneladas de plástico que cada año acaban de la basura. 300 millones de toneladas de los que la mitad son plástico de un solo uso.
