Claudio Tolcachir (La omisión de la familia Coleman, Próximo) vuelve a la Sala Verde de los Teatros del Canal con el estreno absoluto de La máquina de Turing, que estará en cartel del 22 de octubre al 15 de noviembre y en la que dirige a los actores Daniel Grao (que repite a las órdenes del dramaturgo argentino tras Emilia, y en teatro también ha interpretado La piedra oscura o Ilusiones) y Carlos Serrano (La ternura). La obra adapta un texto que el dramaturgo francés Benoit Solès escribió, a su vez, a partir de la obra Breaking The Code, que Hugh Whitemore publicó en 1986.
Solès se llevó cuatro prestigiosos Premios Molière por esta pieza que narra el destino que corrió el matemático, científico, criptógrafo y atleta inglés Alan Turing, a quien se considera el precursor de la informática moderna porque, en su centro de operaciones de Bletchley Park, una instalación militar ubicada en Buckinghamshire (Inglaterra), diseñó el primer ordenador de la historia, conocida popularmente como ’la máquina de Turing’. Logró crearla a partir de una reconceptualización del algoritmo, y los cálculos que la computadora le permitió hacer, mucho más rápidos que los que estaban al alcance de cualquier mente humana, fueron decisivos durante la II Guerra Mundial para descifrar los códigos de la famosa máquina Enigma, y con ellos, los aliados anticiparon los ataques y movimientos militares nazis, y se adelantó el fin de la contienda.
Se considera que Turing salvó, así, miles de vidas, con un trabajo que se mantuvo enmarcado en los servicios secretos hasta que salió a la luz en los años 70. Para entonces, el científico ya había fallecido, murió un 7 de junio de 1954 al morder una manzana envenenada con cianuro. El juez forense que investigó su caso concluyó que se había suicidado, quizá por el tratamiento de castración química al que se estaba sometiendo para evitar la cárcel tras ser condenado, en 1952, por mantener una relación homosexual con un joven de 19 años. Pero la madre de Turing y varios historiadores siempre sostuvieron que esa muerte fue accidental. En todo caso, se truncaba la carrera de uno de los mayores genios del siglo XX, y solo en 2012, con ocasión del centenario de su nacimiento, recibió el perdón Real a título póstumo por su condena por gay, gracias a la carta que un grupo de científicos, entre los que figuraba Stephen Hawking, enviaron al diario The Daily Telegraph.
La máquina de Turing no es la única ficción que se ha inspirado en la vida del genio británico: en cine se ha estrenado The Imitation Game sobre su influencia en el fin de la Segunda Guerra Mundial, y Arthur C. Clarke o Ian McEwan han creado personajes y tramas literarias pensando en los logros de este científico.
Ciencia
La vida de Alan Turing llega al teatro
Considerado el padre de la informática moderna, sus cálculos fueron decisivos durante la II Guerra Mundial para descifrar los códigos nazis, adelantar el fin de la contienda y salvar miles de vidas

La máquina de Turing