Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno, ha desvelado qué serie le recuerda al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, y no ha dejado indiferente a nadie con su elección. La también ministra de Trabajo ha visitado La Script, un podcast sobre cine y series que ha publicado este jueves la entrevista con la política, quien ha hablado de Pablo Iglesias, Pedro Sánchez así como de las rencillas políticas dentro del Gobierno, entre otras muchas cosas.

Una de las declaraciones más llamativas se ha producido cuando ha explicado cuál es la serie con la que siente más identificado al presidente del Partido Popular, un título que seguro no le va a gustar. Y es que a Díaz se le ha venido un nombre a la cabeza que, ha reconocido, "no debe decir", aunque se ha lanzado al barro.

En concreto, la titular de Trabajo ha relacionado a Feijóo con Fariña, una adaptación de un libro con el mismo nombre que habla sobre unos antiguos traficantes de tabaco de Galicia que dan el salto a las drogas. "Estaba pensando en Fariña pero no debo decirlo. No sé por qué me vino", ha afirmado entre risas. Cabe destacar que el popular ha sido protagonista de una gran polémica por aparecer en una fotografía a bordo de un yate con un amigo involucrado precisamente en este negocio ilegal.

Con todo, Díaz ha reconocido que el gallego "es un enorme adversario político" además de "escurridizo y difícil". Preguntada por si es un "villano", la ministra ha rechazado calificarle como tal y ha vuelto a insistir en que es un "gran adversario" ya que "saca los resultados electorales que saca". "Me han atacado por decir esto pero es verdad", ha afirmado

Sin embargo, la vicepresidenta del Ejecutivo ha declarado -tal y como ya hizo el pasado viernes en un acto con Sumar en Bilbao- que Feijóo "no tiene un proyecto político". "Lo tiene muy caduco, de los años 90, y no tiene una idea nueva", ha afeado, para añadir que "es un personaje que mira para atrás, no mira hacia el futuro, a un mundo que no existe, del bipartidismo y políticas viejunas".

Díaz "amenaza" con contar qué pasó con la reforma laboral

La ministra ha protagonizado el último episodio de La Script, donde ha hecho una análisis político de las series y ha utilizado las series para explicar la realidad detrás de la política. Precisamente esto es lo que ha hecho a raíz de títulos como The Crown (el programa se grabó antes de la muerte de Isabel II) o Juego de Tronos, de la que han destacado los "chuchillos por la espalda" y las traiciones.

A este respecto, Díaz ha afirmado que "la realidad supera con creces la ficción" y ha amenazado con contar algunas cosas que ocurren detrás de ciertos debates. "Algún día contaré algunas cosas, como lo que pasó con la reforma laboral", ha comenzado a decir ante la insistencia de María Guerra, la presentadora. "Lo que he vivido da para una grandísima película de una reflexión... no puedo decirlo claramente", ha insistido, dejando sobre el aire la posibilidad de sacar un libro para explicar estos detalles.

Además, ha asegurado que entonces vivieron muchos momentos de tensión que ella supo manejar. "Mi equipo estaba desbordado y asustado, pero yo veía las cosas clarísimas. Hice lo que tenía que hacer", ha afirmardo con vehemencia. Díaz ha comparado estas series con el "pulso brutal por el poder", que dice a ella no le "pone". "Me gusta hacer cosas que cambien la vida de la gente, no voy a estar en esa concepcion masculina, jaleosa, no me interesa nada", ha dicho.

También ha apuntado a las luchas internas que esta reforma laboral o el hecho de la salida de Pablo Iglesias de la vicepresidencia pudo levantar en el seno del Gobierno. Tras asegurar que en todas las esferas de poder "priman las batallas culturales y quien se pone la medalla", Díaz ha afirmado que ella les "regala las medallas"

"La guerra que hubo por las vicepresidencias cuando Pablo salió lo resolví en un segundo. Me importa un rábano, quédese con el número de vicepresidencia que quiera, a mi me da igual", ha comentado, poniendo en el foco a Nadia Calviño -que actualmente ocupa la vicepresidencia primera- y a Teresa Ribera, que ostenta la tercera. "Todo el mundo me decía que era un error, pero no, hay que hacer las cosas diferentes. Nunca me voy a apeler con otra mujer", ha dicho al respecto.