Las consecuencias de la bofetada de los Premios Oscar continúan golpeando a Will Smith. Tras la polémica que se generó por agredir a Chris Rock al mofarse de la alopecia de su mujer, Jada Smith Pinkett, el actor ha tomado la decisión de ingresar en una lujosa clínica de rehabilitación para gestionar su estrés, según ha revelado este miércoles el medio británico The Sun. 

Smith se encontraría muy afectado por todo lo sucedido, por lo que ha optado por meditar y reflexionar acerca de su comportamiento. "Las consecuencias de su reacción violenta han afectado duramente a Will, por lo recibirá ayuda para lidiar con el estrés. Será un retiro de alto nivel frecuentado por ricos y famosos, y en él, hará un gran examen de conciencia y trabajará para descubrir cómo puede seguir adelante", señalan las fuentes cercanas del citado medio, que también añaden que el actor ha ingresado por voluntad propia. 

Su carrera cinematográfica, salpicada por el polémico episodio

Este suceso no solo le afectó al actor a nivel personal tal y como ha demostrado en sus declaraciones posteriores, sino que también ha tenido duras consecuencias a nivel laboral. Adelantándose a la decisión de la Academia de Cine, Will Smith renunció el pasado sábado a formar parte de la organización: "La lista de personas a las que he lastimado es larga e incluye a Chris, su familia, muchos de mis queridos amigos y seres queridos, todos los asistentes y la audiencias del mundo entero desde casa", lamentó a través de una carta. 

Poco después, algunos de los proyectos que tenía previstos para los próximos meses, como Bad Boys 4 y Fast and Loose, han tenido que paralizarse hasta que se conozca la decisión de la Academia y actuar en consecuencia a esta. De este modo, Smith también ha sido objeto de las críticas por parte de sus compañeros de escena, quienes han criticado el gesto violento que protagonizó el actor en los Oscar.