“No le gustas a Whasapp. Descárgate Telegram, la app alternativa a la censura y únete al canal de Vox”. Con estas palabras publicadas en su perfil oficial de Twitter, la formación de Santiago Abascal pedía a sus feligreses que iniciaran masivamente una migración digital. ¿El motivo? No es un secreto que la ultraderecha se nutre de bulos y fake news, por lo que tras trascender que WhatsApp implementaría limitaciones al reenvío masivo de mensajes en un intento de frenar el spam y la difusión de bulos, Vox le ha declarado la guerra.

En su canal oficial de Telegram, que es abierto, explican a sus seguidores en cinco sencillos pasos “cómo reenviar un mensaje a varios contactos simultáneamente”, para así, seguir difundiendo sus mensajes de forma masiva.

Vox explica cómo reenviar mensajes en Telegram
Con la migración, el canal de Telegram suma ya cerca de 45.000 seguidores; cuando hace dos días tenía 20.000. La extrema derecha ha duplicado el número de suscriptores a su canal en apenas 48 horas y ya tienen más que Podemos, que suma poco más de 31.000; con el añadido de que los morados fueron pioneros en el uso de Telegram.

Resulta paradójico que el cambio esté motivado, precisamente, por un bulo. Y es que, Vox ha huido de WhatsApp alegando que sus comentarios y difusiones serían censurados por empresas como Newtral y Maldita.

En este punto caben dos matices. El primero es que dichas empresas no censuran, sino que verifican informaciones, pero en ningún caso lo hacen sobre mensajes de WhatsApp. Además, de ser así, que no lo es, no habría nada que temer si fueran publicaciones veraces y no bulos, como acostumbra a propagar Vox.

En todo caso, Newtral y Maldita hacen las veces de verificadores, junto a otras compañías como la agencia de noticias AFP, en calidad de asesores externos y para Facebook, no así para Whatsapp, aunque pertenezcan a la misma multinacional.

Y así es como Vox pidió la migración: a través de un bulo. Sin ejemplos. Sin un solo caso de censura o manipulación manifiesta.

No cabe duda de que la estrategia les ha funcionado, Buena muestra de ello es que, antes del cambio, los feligreses ultras iniciaron una campaña que aún colea contra Newtral y Maldita, así como contra sus periodistas. Los ataques contra Ana Pastor se han intensificado. Incluso políticos como Esteban González Pons o Rafael Hernando han participado de esta suerte de teoría de la conspiración de mensajería instantánea.