Tamara Falcó está radiante. Acaba de cumplir 42 años y se va a independizar ya de su madre, Isabel Preysler. La celebrity se muda ya a su lujoso ático de 1,5 millones de euros, de 186 metros cuadrados y terraza con piscina. Lo hará junto a su nuevo marido, Íñigo Onieva, con el que hasta ahora ha vivido en casa de la madre de ella. Eso sí, el ático está en la elitista urbanización de Puerta del Hierro, a pocos metros de la mansión de su madre.
Tamara Falcó está en uno de los momentos más dulces de su vida, tras su boda y su luna de miel por el mundo, la celebrity no ha parado de viajar y acaba de volver de pasar unos días a todo tren en el País Vasco, donde se ha alojado en el lujoso hotel María Cristina de San Sebastián y donde ha podido visitar el museo Chillida.
”Ya admiraba a Chillida antes pero escuchar cuáles eran sus inquietudes, como lo era el alma versus la gravedad de Newton, me ha hecho admirarle mucho más”, confesaba en sus redes sociales la celebrity, revelando sus más íntimas inquietudes artísticas.
Esta semana, la celebrity acudía a la tradicional fiesta navideña de Moët&Chandon en el hotel Ritz, llena de caras conocidas, y contaba sus ilusiones actuales y también su posición sobre la maternidad, algo que no le agobia: “Rezo todo el tiempo y si tiene que ser, será. Lo que Dios quiera, sin presión”. Sin presión para ella, no para Dios.
La posibilidad de ser madre era la pregunta del millón después de que fuera pillada en una clínica de fertilidad, ha explicado: "La verdad es que yo, o sea, rezo todo el tiempo y si tiene que ser, será. Y si no, la verdad es que estoy felizmente casada ahora mismo viviendo un momento súper bonito, así que no sésin presión, sin presión, lo que Dios quiera por el momento a disfrutar de la Navidad y de su familia".
Cinco meses después de su matrimonio, se le acumulan los proyectos y todos salen adelante con éxito, como su línea de ropa, TFP by Tamara Falcó, que ha sacado en colaboración con Pedro del Hierro, y en la que destacan sus tonos chocolate para este otoño.
Tras su crisis sentimental, resuelta matrimonio mediante, Tamara Falcó está ilusionada porque estas navidades pasará todos los nanosegundos del metaverso con su familia, celebrando los dos días en casa de Isabel Preysler. “Pues este año tocamos con mi familia, así que feliz, feliz. Los dos días, los dos días, el año que viene con la suya”, si Dios quiere.
