El rey emérito está de vuelta. Este jueves el monarca aterrizaba en Vigo a eso de las 19:15 horas. Lo hacía en un jet privado de lujo y fue recibido, entre otros, por la infanta Elena y su amigo personal y presidente del Club Náutico, Pedro Campos. Las reacciones a la llegada del monarca son de todo tipo y vienen desde todos los sectores, no solamente el político. De hecho, ha sido uno de los temas que ha ocupado la tertulia de El Hormiguero esa misma noche.

Así las cosas, entre la opinión de los colaboradores de Pablo Motos destaca la de Tamara Falcó, quien defendió -como ya hiciera cuando se conoció que el monarca volviera a España- que este pisara nuevamente el país después de dos años y sin dar explicaciones, siendo este último el punto que buena parte de la sociedad le recrimina.

En esta ocasión, mientras que sus compañeros de mesa criticaban en mayor o menor medida la manera en la que el padre de Felipe VI había hecho las cosas, la hija de Isabel Preysler reconocía que le “emociona” que esté de vuelta, ya que “ha sido absuelto”; algo que, por otro lado, no es cierto.

“El rey ha sido absuelto, va a pasar por un montón de críticas y a mí me emociona que esté de vuelta”, sostuvo la también diseñadora. A continuación, defendió que Juan Carlos I había sido “muy discreto yéndose a Vigo en vez de a Madrid”: “Yo le he visto totalmente normal”.

Por su parte, la periodista Cristina Pardo, que por la tarde había dado la última hora sobre el aterrizaje de Juan Carlos I, calificaba de “retador” la manera en la que el antiguo rey había llegado. En una línea similar, la también informadora Nuria Roca subrayó que “quizá debería de haber priorizado algunas cuestiones” antes de irse a las regatas.