A pesar de la complicada situación de la sanidad pública en la Comunidad de Madrid, el Gobierno regional continúa mostrándose de lo más crítico con los profesionales que apoyan y van a la huelga.

Y es que el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Javier Fernández-Lasquetty, ha sido el último en pronunciarse al respecto para decir que el Comité de Huelga de médicos, liderado por el sindicato Amyts, va “cambiando” sus reivindicaciones para buscar “un conflicto político”.

Asimismo, el consejero de Isabel Díaz Ayuso aseguró en rueda de prensa acusó al resto de comunidades autónomas de ofrecer unas “retribuciones mayores para evitar que médicos y enfermeros se vengan a Madrid”.

Unas palabras que no han estado exentas de críticas, siendo una de las más compartidas la esgrimida por Quique Peinado. “Liberal en lo económico, esclavista en lo sanitario”, ha escrito el periodista este lunes a través de sus redes sociales.

El Gobierno de Ayuso habla de huelga “política”

No es la primera vez que el Ejecutivo madrileño habla en estos términos de la huelga de médicos y pediatras de la Atención Primaria, la cual arrancó el pasado mes de noviembre y aún persiste con fuerza, prueba de ello, la manifestación del domingo 12 de febrero.

En las recientes palabras de Lasquetty, acusan a la izquierda de que “cada cuatro años”, cuando se acercan las elecciones, “manipulan políticamente”. Unas declaraciones que se suman a las previas del consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, sobre la misma cuestión, quien acusó a Amyts de prolongar la huelga por motivaciones políticas: “No tienen voluntad de acuerdo. […] Cada vez que hay una reunión, hay una nueva reivindicación”, criticó.

Asimismo, una de las últimas medidas de Ayuso al respecto fue la total prohibición de carteles, pancartas y recogidas de firmas para apoyar la huelga en las inmediaciones de los hospitales y centros de salud públicos, todo ello, justificaron, para “garantizar el uso adecuado” de las instalaciones. Un acto que, a modo de respuesta, ha derivado en el apoyo aún más fuerte de los vecinos y el aumento de las protestas por parte del sector.