La Comunidad de Madrid sigue elevando el tono contra los sanitarios, pese a que cada día que pasa la precaria situación de la sanidad en la región cosecha más y más voces críticas. Exactamente siete días después de que 250.000 personas –más de un millón según los organizadores de la marcha- tomaran las calles de Madrid para protestar contra el desmantelamiento de la Sanidad Pública del Partido Popular, el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Javier Fernández-Lasquetty, ha acusado al comité de huelga de médicos y pediatras de Atención Primaria de ir “cambiando” sus reivindicaciones buscando un “conflicto político”.
En concreto, Lasquetty, en declaraciones a los medios de comunicación en la presentación de la nueva herramienta virtual para calcular el ahorro en el impuesto de Sucesiones, ha reprochado que el comité vaya añadiendo "peticiones que no estaban" porque no quiere "la solución" sino "el conflicto".
Además, ha subrayado que la izquierda lo hace "cada cuatro años" cuando se acercan las elecciones con interés de "manipular políticamente". Lasquetty ha defendido que el Gobierno del PP ha hecho que haya "muchos más recursos y disponibilidad" en Atención Primaria con un presupuesto de Sanidad de hasta los 10.000 millones de euros.
De esta manera, estas palabras de Lasquetty se suman a las que pronunciaba recientemente el consejero de Sanidad de la región, el polémico Enrique Ruiz Escudero, que también acusó a Amys de estar prolongando la huelga única y exclusivamente por razones políticas: “Sin ninguna duda”. “No tienen ninguna voluntad de acuerdo. Cada vez que llegamos a un preacuerdo o nos acercamos vienen con una reivindicación nueva. Esto responde a algo que no es estrictamente sanitario o de organización de los centros de salud. Cada vez que hay una reunión, hay una nueva reivindicación”, denunció Escudero.
Hay que recordar que los médicos y pediatras de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid llevan en huelga desde el 21 de noviembre. Casi tres meses de paros en los que ni Escudero ni Lasquetty (ni tampoco Ayuso) han asistido a las diferentes reuniones infructuosas que la Comunidad de Madrid ha mantenido con Amyts, sindicato convocante de la huelga.
