“¡Dios bendiga al abuelo de Carlos Alcaraz!”. Este fue el mensaje que publicó este sábado la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, después de que el tenista español de 19 años hiciera otra epicidad y venciera a Novak Djokovic (número 1 del mundo) en las semifinales del Mutua Madrid Open de Tenis, que se está celebrando en la Caja Mágica.

Un mensaje de Ayuso –el mencionado tuit iba acompañado además de un vídeo del punto final- con el que la presidenta madrileña hacía referencia a la lección que el tenista español dijo que su abuelo le enseñó: “Él siempre me decía: cabeza, corazón y cojones”.

Sin embargo, el tuit de Ayuso rápidamente se le volvió en contra, al igual que sucede con buen número de mensajes de la presidenta madrileña. Muchos usuarios aprovecharon sus palabras para recordar y afear a la dirigente popular su gestión de las residencias de mayores en la Comunidad de Madrid durante los meses más duros de la pandemia del coronavirus.

“Dios bendiga al mío que murió de covid en una residencia porque tu administración le negó un hospital”, “Dios bendiga al abuelo por no haber estado en una residencia madrileña en marzo de 2020”, “que tu Dios bendiga a todas las abuelas a las que dejaste morir solas” o “pues menos mal que es murciano y vive junto al Hospital de la Arrixaca, en el Palmar. Si llega a ser madrileño estarías dándole el pésame” son algunas de las réplicas que ha recibido Ayuso.

Reclaman “que se investigue” la muerte de ancianos en residencias en la primera ola

Precisamente hace poco más de un mes una manifestación reclamaba en Callao (Madrid) “que se investigue” la muerte de ancianos en residencias durante la primera ola de la pandemia de Covid-19.

En concreto, el colectivo Marea de Residencias, convocante de la concentración, cifraba en más de 7.000 personas el número de ancianos fallecidos durante esta primera ola. Su portavoz, Maribel Nieto, aseguraba que "se luchará con todas las fuerzas" por los "fallecidos, abandonados y sin asistencia sanitaria" hace dos años.

Los congregados asistían con carteles en los que se podían leer proclamas como 'Por la Justicia, pedimos responsabilidades, ya'. 'Por otro tipo de residencias' o 'Residencias de calidad gestión 100% pública".