La Agencia Tributaria continúa con su lucha contra el fraude fiscal cometido por personajes famosos o que trabajan en el mundo del espectáculo y la cultura.

Como ha adelantado Cinco Días, los dos últimos casos que acaban de pasar por los tribunales de lo contencioso-administrativo han sido los de Carmen Machi, actriz que dio vida al popular personaje de Aída, entre otros, y el de Jordi Rebellón, actor que encarnó al famoso Doctor Rodolfo Vilches en Hospital Central.

Sus problemas con Hacienda vienen dados por utilizar sociedades para facturar sus sueldos y honorarios. Las sentencias explican que “si bien es legítimo la interposición de sociedades profesionales, no lo es la creación de sociedades con la única finalidad de eludir parte de la carga fiscal sin aportar nada a la actividad que realiza la socia".

Esta práctica ilegal ha hecho acudir a los juzgados a personajes de la televisión como Patricia Conde, delatada por el portero de su vivienda, o Màxim​ Huerta, que defraudó 256.778 euros a Hacienda entre 2006 y 2008 utilizando una sociedad interpuesta para pagar menos impuestos.

‘Mama Floriana’ la sociedad de Carmen Machi

Gracias a la creación de Mama Floriana, Machi pudo eludir los tipos impositivos más elevados en el IRPF y deducir gastos que no eran deducibles en el impuesto sobre sociedades.

A causa de la multa que se le ha interpuesto por una infracción tributaria leve en conceptos del IRPF de 2007 a 2009 tendrá que pagar una multa de 83.155 euros. Previamente, la cantidad que tuvo que abonar fue de 237.000 euros para regularizar su situación con el fisco.

Sin embargo, con la sanción no ha estado conforme y ha intentado recurrirla alegando que era “desproporcionada” y que ella no era la socia mayoritaria de la sociedad Mama Floriana. Un recurso al que se han opuesto los jueces ya que al no ingresar su IRPF desde el año 2007 a 2009, años en los que la actriz trabajó activamente en cine y televisión, la cifra es tal que no se puede compensar con los impuestos pagados por otros contribuyentes.

Traspapelat’ la de Jordi Rebellón

La sociedad creada para que el actor facturara sus servicios entre el 2005 y el 2007 fue Traspapelat. Según la sentencia, la entidad era contratada por terceros para que el servicio lo diera siempre Rebellón, por lo que se llegó a la conclusión de que “no se justifica con la intermediación de Traspapelat ninguna ventaja económica ni de ningún tipo salvo la elusión fiscal o de una menor tributación en el IRPF

Además, el Inspector de la Agencia Tributaria, no ha admitido como gastos deducibles de la sociedad compras en El Corte Inglés, Mercadona o Leroy Merlin, o arreglos de automóviles, la prima del seguro o viajes en taxis, trenes o pagos en parkings. Ascendiendo todos estos gastos a más de 45.000 euros.