Carla Bruni ha sido la invitada de El Hormiguero de este lunes, pero con una pequeña diferencia: la catante estaba en París. Lo ha hecho para promocionar su nuevo disco que sale a la venta esta semana con su mismo nombre. El motivo de llamarse igual que la cantante es porque "no había encontrado un título tampoco", confesaba entre risas. 

En la entrevista ha hablado también de la situación que vive Francia respecto a la Covid-19. "Estamos en estado de alerta máxima y tenemos que cerrar los bares, limitar las reuniones pero soy optimista porque creo que van a encontrar un remedio pronto para esta enfermedad", decía recordando que hoy se han aprobado importantes medidas en París.

También ha habido tiempo para hablar sobre su forma de escribir canciones, su relación con el expresidente Sarkozy, además de sus etapas en el mundo de la moda, el cine o la música.

Pablo Motos peguntaba a Bruni sobre en qué etapa de su vida había finjido más. "Cuando uno tiene una imagen pública hay que fingir un poco, porque hay un personaje que nos ayuda", confesó en referencia a la época en la que fue la primera dama.

Sin embargo, ha asegurado que su marido nunca le ha preguntado por asuntos políticos, algo que ha agradecido con un "menos mal. También ha confesado que "me protegía mucho".

Pese a que no le decepcionó, ha asegurado que no quiere "volver a repetir". "Fue un orgullo, un momento interesante, excepcional, me enriqueció, fue muy intenso pero no volvería de cero", contaba a Motos.

Por eso ha confesado que el secreto para continuar casados 12 años despues es "un milagro, el azar, algo solo funciona si recordamos que puede fracasar".