Hay que remontarse a diciembre de 2018 para entender el contexto en el que el periodista Cake Minuesa presentó una demanda contra su compañera de profesión Beatriz Talegón. El 21 de aquel mes, el reportero de Intereconomía sufrió una agresión por parte de uno de los manifestantes que se concentraron en las calles de Barcelona contra la celebración del Consejo de Ministras en las entrañas de la ciudad. Tres años después, Minuesa ha dado marcha atrás y ha “desistido” en su querella y deberá abonar a la demandada 3.000 euros por las costas del juicio.

El periodista de Intereconomía Cake Minuesa informaba sobre una de las protestas que los CDR programaron contra la celebración del Consejo de Ministras en Barcelona. Los manifestantes impedían la transmisión y el trabajo del periodista, que exclamaba que sólo querían trabajar.

Tras deshacerse de varios manifestantes, Cake Minuesa seguía hablando a cámara cuando la conexión se interrumpe con un mensaje de “signal imput”. La señal vuelve justo cuando un manifestante irrumpe en el plano cogiendo fuerza y distancia con el brazo para, tras una carrerilla, agredir al periodista.

El vídeo recorrió las redes sociales a la velocidad del rayo y no le faltaron reacciones, tanto de condena como reproches por una presunta manipulación. En este sentido, la tertuliana de TV3 publicó el clip de la agresión captada desde otro ángulo y sin cortes, animando a sus seguidores a “rularlo”, pues pretendía demostrar que el ataque a Minuesa no era sino un montaje. “En este vídeo queda bastante claro el montaje del que pega al periodista”, exclamó la periodista en su perfil de Twitter, replicando esta teoría en el programa de la televisión catalana Preguntes freqüents.

Tras esto, el comunicador emitió una nota de prensa a través de su despacho de abogados en el que anunciaba medidas legales contra la periodista por presuntos delitos de incitación al odio, injurias, lesiones, coacciones e intimidación. La decisión fue adoptada, según relató en su momento, “en defensa de los derechos al honor, intimidad e imagen tanto en la vía civil como en la vía penal” ante cualquier persona que alegue que se trataba de “un montaje” o una “agresión simulada”.

Tres años después, la denuncia no ha llegado a ningún puerto, forzando al periodista a “desistir” en su empeño de demandar a Beatriz Talegón. Así lo anunció Minuesa en sus redes sociales en la madrugada de este miércoles al jueves. “Quiero comunicar que he desistido en la demanda contra Beatriz Talegón, motivada en su día por un mal asesoramiento y que fue completamente injustificada”, argumenta en Twitter el periodista de Intereconomía, quien lamenta “profundamente” las molestias causadas, así como “el daño a su imagen pública y honor”.

Talegón recogía el guante, también a través de Twitter, y celebraba la decisión tomada por el denunciante. “Poner demandas con acusaciones falsas puede salirte muy caro”, ha advertido la periodista, quien considera “delicado” dejar en manos de un “abogado que quiere pasta y notoriedad” el asesoramiento legal. “Menos mal que un abogado decente le supo aconsejar. En breve debe ingresar 3.000 euros para mis abogados”, ha zanjado.