Año nuevo, vida nueva. Si esto es lo que tienes en la cabeza, si realmente piensas que 2024 es el año en que quieres lanzarte y conseguir que triunfe tu proyecto de emprendimiento, en El Telescopio tenemos algunas claves que te pueden ayudar a hacer realidad tu sueño.

Hemos repasado las entrevistas que hemos realizado este año a emprendedores y hemos extraído unas cuantas enseñanzas que te pueden servir para no tirarte al vacío a lo loco.

La libertad de no tener financiación externa no tiene precio

Un camino diferente

A Stephanie Marin, fundadora y CEO de Work Your Face, te la presentábamos el pasado mes de noviembre. Es, probablemente, la emprendedora más atípica que haya pasado por El Telescopio. Todo lo hace distinto. Y la razón puede que sea que su mayor activo es… la libertad.

Para conservarla, ha optado por un modelo de financiación poco “ortodoxo”: “Nadie ha invertido dinero, no tengo fondos de inversión, business angels…”.

Está claro que poner en marcha un negocio sin apoyo financiero externo es más complicado y no todo el mundo puede conseguirlo, pero Marin asegura que es la forma de mantener la independencia y tomar decisiones de forma rápida y enfocada solo a tu visión.

Eso sí, se trata de “libertad, dentro de una gran responsabilidad”. Pero es la mayor ventaja del emprendimiento, a su juicio: “Si tienes que salir, que hacer algo, tienes un viaje -sea de trabajo o no-, tienes esa libertad y creo que eso no tiene precio”, explica”.

Busca un trabajo que te permita compatibilizarlo

Equilibrio y pausa

Una premisa que también defiende Blanca Miñano, fundadora de Skinvity: “No tengo inversores. Como soy economista, una de las cosas que he cuidado mucho son los aspectos económicos del proyecto y tener mucha independencia”.

Miñano también tiene un enfoque diferente en cuanto al lanzamiento del proyecto. En lugar de dejarlo todo de golpe para emprender, optó por una estrategia que refleja muy bien su capacidad para gestionar riesgos: “Lo que hice fue buscar un trabajo que me permitiese compatibilizarlo. No me lancé de 0 a 100. Tenía más tiempo disponible para emprender en paralelo. Y cuando llevaba poco menos de un año, ya me decidí a dar el salto en todo”.

Ryan Frankel estuvo a punto de morir en un accidente de bicicleta

En tus propias carnes

La mayoría de emprendedores que entrevistamos han concebido sus proyectos en base a experiencias propias, a haber sentido la falta de una solución para sus problemas.

Es el caso de Ryan Frankel, CEO de This App Saves Lives, una aplicación que, como su propio nombre indica, se propone salvar vidas. Y lo hace con una recomendación muy sencilla: no uses el móvil mientras conduces. 

“Fundé la empresa después de sufrir graves lesiones y casi morir mientras montaba en bicicleta, cuando un conductor distraído se saltó un semáforo en rojo mientras enviaba un mensaje de texto”, explicaba en su entrevista.

¿Cómo logras que tu marca esté en el radar?

Tecnología y marca

En su caso, los mayores retos fueron “en primer lugar, la tecnología. Es muy difícil de replicar. Estamos muy orgullosos de nuestra capacidad para medir las distracciones al volante. Y en segundo lugar, el conocimiento de marca. Hay cientos de millones de conductores en todo el mundo. Todos estamos inundados de nuevas aplicaciones, anuncios, productos y servicios. ¿Cómo logras que tu marca esté en el radar de un conductor y cómo mantienes tu producto en sus manos mucho después de que lo haya descargado por primera vez?”.

Además, se han apoyado en otras palancas: “Lo que nos ha funcionado muy bien es la idea de que siempre estás ganando recompensas. Pero también hemos incluido elementos de gamificación. ¿Soy un conductor más seguro que mi pareja? ¿Soy un conductor más seguro que mi amigo? Así que también hay un poco de diversión

Adaptación al cambio

Juliana Ramalho es la fundadora y CEO de Talento Sênior, una startup brasileña que busca contratos para personas de más de 50 años que hayan perdido su empleo. Y, a la vez, da respuesta a la necesidad de conocimiento y experiencia que hay en muchas startups.

En su caso, la clave está en la adaptación al cambio. En 2008 desarrolló el primer plan de negocio para su proyecto. Sin embargo, en 2015 las leyes cambiaron y durante la pandemia decidió dar un giro y cambiar toda su estrategia.

Está claro que emprender no es fácil, así que, antes de lanzarte a lo loco, piensa bien en las implicaciones que tiene para ti y para quienes te rodean. Pero, si lo haces, en El Telescopio siempre tendrás un hueco para contarnos tu experiencia y que otras personas puedan aprender también.