Enero de 2023 arranca con sendas medidas del Gobierno para frenar el impacto de la subida de precios sobre los ciudadanos como la rebaja del IVA en los productos básicos, el cheque de 200 euros para la cesta de ĺa compra o la congelación del precio de los alquileres. Sin embargo, hay una serie de costes que el Ejecutivo no ha podido frenar y que, desde este mismo 1 de enero, podrían complicar la cuesta de enero de los españoles. Es el caso del euríbor -principal indicador de las hipotecas españolas-, el precio de los peajes de las autopistas o el mayor gasto a la hora de llenar el depósito de gasolina tras el fin de la bonificación estatal de 20 céntimos para todos los conductores. 

El euríbor cierra 2022 en el 3%, máximos de 2008

En primer lugar, el euríbor ha cerrado el año en el 3,018%, su mayor cifra desde 2008, como consecuencia de las últimas subidas de los tipos de interés. El euríbor es el índice más popular para calcular las hipotecas españolas a tipo variable. Como su propio nombre indica, este modelo de hipotecas cambia de precio constantemente en función de dicho indicador. 

El principal índice de referencia del mercado hipotecario español empezaba 2022 con un valor de -0,477%, manteniendo la tendencia negativa de los últimos años. Esto supone que, no solo el euríbor se ha disparado en más de un 3% en los últimos doce meses, sino que también ha cambiado de signo: de negativo a positivo. La tendencia negativa se revirtió con la invasión rusa de Ucrania a finales de febrero y las consecuencias de ella, provocando que el Banco Central Europeo (BCE) haya llevado a cabo varias subidas de tipos a lo largo de 2022. 

Ahora, con el 2023 ya en marcha, se prevé un aumento del coste de las hipotecas de entre 280 y 300 euros mensuales en un momento especialmente crítico en el que la cuesta de enero marca el arranque del año. 

El Gobierno y la banca pactan medidas para ayudar a pagar la hipoteca

Con las previsiones de continuar la tendencia alcista del euríbor en 2023, el Gobierno y las grandes entidades bancarias se pusieron manos a la obra para aprobar una serie de medidas que protegiera a la clase media a la hora de pagar la hipoteca todos los meses. Conscientes del problema que suponía -en el momento del acuerdo pero también de cara al futuro- ambas partes aprobaron frenar las subidas en las hipotecas, así como renovar el Código de Buenas Prácticas de la banca, desactualizado desde hace décadas. 

El acuerdo se materializó a finales de noviembre en tres grandes vías de actuación. En primer lugar, a través de la mejora del Código de Buenas Prácticas para familias vulnerables, es decir, familias con rentas inferiores a los 25.000 euros al año y un esfuerzo hipotecario del 50%, con alternativas para proteger el pago de sus hipotecas. La segunda gran vía pasa por la ampliación del Código de Buenas Prácticas para aplicarlo a más de 300.000 familias, destinado no solo a las familias más vulnerables, sino también a las clases medias. El tercer gran bloque de medidas incluye alternativas adicionales como la reducción de los costes de pasar de hipotecas de tipo variable a tipo fijo.

Además de las tres vías del acuerdo de las hipotecas, Calviño anunciaba la creación de la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, una reclamación del sector que finalmente unirá todos los servicios de reclamaciones en un sola autoridad, con un sistema de presentación de reclamaciones gratuito

Conducir es más caro que en 2022: suben los peajes

El mayor coste de las hipotecas no es el único problema económico al que se enfrentan los españoles desde el mismo 1 de enero. También tendrán que preocuparse los conductores habituales por el encarecimiento de los peajes en un 4% -menos de la mitad del 8,4% que tendrían que subir por el contrato a largo plazo ratificado entre las empresas concesionarias y el Ministerio de Transportes- en las distintas autopistas españolas. En concreto, el precio para circular por ellas aumenta en once autopistas de pago: AP-51, AP-61, AP-53, AP-66, AP-7 Alicante-Cartagena, AP-7 Málaga-Guadiaro, AP-68 y AP-71, AP-9, AP-6 y AP-46.

Las concesionarias de las autopistas españolas cuentan con contratos a largo plazo con el Gobierno que incluyen la revisión anual de precios según el IPC interanual. Así, las concesionarias pedían un aumento de precios de entre un 8,4% y un 8,5%, tal y como cerró la inflación interanual en el mes de noviembre. No obstante, el Ministerio de Transportes ha optado por una alternativa para limitar la subida de la inflación en los peajes nacionales. El Ejecutivo ha habilitado para ello una línea dotada con 23,3 millones de euros, con partidas para mitigar de forma parcial el aumento de la inflación.

Así, las subidas de precio de los peajes se materializarán de forma escalonada entre 2024 y 2026. El objetivo de la medida, según el propio Ministerio de Transportes encabezado por Raquel Sánchez es "ayudar a la ciudadanía a afrontar el escenario actual de altos precios de la energía, derivado de la persistencia del conflicto en Ucrania tras la invasión rusa, que afecta muy especialmente a la movilidad y a la renta disponible de los hogares".

El Gobierno retira el descuento general de 20 céntimos a la gasolina 

“Una vez se ha moderado el precio de los carburantes, hemos decidido retirar el descuento o la bonificación en general, pero sí mantenerla como una ayuda más a los sectores más afectados, tanto a los sectores del transporte de pasajeros como de mercancías”, explicaba el miércoles la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez sobre su decisión. No obstante, no cerraba la puerta a volver a aprobar la ayuda en caso de observar un repunte del precio de los carburantes. 

El precio del litro de la gasolina y el gasóleo ha cerrado el año alrededor de los 1,5 euros por litro, lejos de los máximos de 2 euros por litro alcanzados en el verano de 2022. Un momento en el que se juntó el impacto de la guerra de Ucrania sobre los precios energéticos, las tensiones geopolíticas sobre el precio del petróleo y la mayor demanda de carburantes en plena operación salida del verano. 

Ante esto, el Gobierno ha optado por retirar la bonificación de 20 céntimos por litro de gasolina a la hora de repostar para los conductores en general, manteniéndola solo para los "sectores más afectados" de estas subidas de precio. A efectos prácticos, se trata del sector del transporte, incluyendo pescaderos, navieras y taxistas, entre otros. No obstante, el descuento del Gobierno a la gasolina se acaba este sábado, pero no lo hacen los que han puesto en marcha algunas empresas privadas como Repsol, Cepsa BP, que ya han confirmado que mantendrán sus rebajas, al menos, hasta marzo de 2023, "mientras dure el invierno". 

¿Qué baja este 2023? Hacer la compra es más barato

Los precios de algunos elementos básicos diarios suben mientras, en paralelo, otros bajan. Es el caso del coste a la hora de hacer la compra por las medidas que el Gobierno ha incluido en el tercer Real Decreto anticrisis, aprobado apenas unos días antes de terminar 2022. Así, desde este 1 de enero está en vigor la bajada del IVA -hasta el 0% para los alimentos básicos de la cesta de la compra y del 10% al 5% para la pasta y el aceite-, una medida que se complementará con un cheque de 200 euros para hacer la compra, que todos los consumidores podrán solicitar a partir del próximo 15 de febrero. 

Por otro lado, el precio de la luz ha empezado el año en los 114,24 euros por megavatio hora, tras cerrarlo casi gratis el día de Nochevieja. El primer lunes del año arranca con el precio medio de la electricidad más caro que los últimos días de 2022 pero más barato frente a los primeros días del pasado año, en comparación interanual. La excepción ibérica y el tope al gas, replicado ahora por Bruselas, ha permitido que el precio de la luz en España cierre el año muy por debajo de la media europea y, este lunes, es un 23% más barata que si no existiera dicho tope.