La inflación se sitúa en mayo en el 3,2% después de caer casi un punto con respecto al mes de abril (4,1%). El dato armonizado que se utilizada para la comparativa europea arroja mejores noticias aún y se desploma hasta el 2,9%, colocando a España como la tercera economía de la zona euro con el nivel más bajo. La caída continuada está propiciada por la moderación el precio de la cesta de la compra, que en el quinto mes del año vuelve a caer casi un punto desde el 12,9% de abril al 12% de mayo

El dato lanzado conocido este martes evidencian la normalización del precio de la vida, que se sitúa en los valores más bajos desde hace casi dos años. Junto con los alimentos, la caída continuada de los carburantes y la electricidad son los principales factores que están determinado la reducción. La inflación subyacente -aquella que no incluye los alimentos no elaborados ni la energía- continúa a la baja y experimenta un descenso del medio punto que detiene el dato en el 6,1% y lo coloca en niveles del verano de 2022.

Los datos confirmados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) mantienen la senda descendente y sitúan el Índice de Precios de Consumo (IPC) cinco puntos y medio por debajo del dato registrado en mayo de 2022. En julio de 2022 se alcanzó la cifra más alta de la serie (10,8%) y desde aquel momento la inflación se ha reducido el dato en más de siete puntos, alejando a España de la espiral inflacionista europea y situándola muy cerca de la exigencia del 2% emitida por el Banco Central Europeo (BCE).

Este nuevo dato económico en positivo da un espaldarazo al Gobierno en la antesala de las elecciones generales del 23 de julio. “España se mantiene entre los países con menos inflación de la Unión Europea”, celebran desde el Ministerio de Asuntos Económicos, satisfechos con la progresión del nivel de precios español. Esto, trasladan desde la cartera liderada por Nadia Calviño, “mejora la competitividad de las empresas y la economía española y confirma la eficacia de las medidas aprobadas por el Gobierno”.

España, la gran economía europea con el dato más bajo

Los datos de inflación europeos confirmados por Eurostat -oficina estadística europea- elevan a España como la gran economía que mejor marcha presenta desde hace meses. El nivel de la eurozona, a pesar de reducirse nueve décimas en mayo, se sitúa todavía en un 6,1%, más de tres puntos por encima del 2,9% español (para la comparativa europea se utiliza el dato armonizado). Además, entre el conjunto de veinte países que comparten el euro como divisa común la situación es heterogénea.

La mejor progresión la presentan Luxemburgo, con un 2%, Bélgica (2,7%) y España (2,9%), muy alejados de países como Letonia y Eslovaquia, que marcan ambos un 12,3%, Estonia (11,2%) o Lituania (10,7%). Las grandes economías tampoco consiguen aproximarse al dato español, siendo Italia la que marca la cifra más elevada (8,1%), a más de dos puntos de Francia (6%). Por su parte, el motor alemán, que acaba de entrar en recesión técnica, se sitúa en mayo en un 6,3%, levemente por encima de la media de la eurozona.

Caen los alimentos y sube la vivienda

En su evolución mensual el dato se mantiene estable y la bajada interanual de mayor afecta a todos los grupos contemplados por el informe del INE, a excepción de la vivienda. El Transporte cae más de cuatro puntos en mayo y marca una tasa negativa del -3,7% gracias a la caída del precio de los carburantes y lubricantes. El Vestido y calzado reduce sus precios tres décimas y se detiene en el 1,9%, a pesar de que el coste de sus componentes ha crecido.

Los dos subgrupos que más afectan a la ciudadanía, la Vivienda y los Alimentos, muestran progresiones muy diferentes. Mientras la cesta de la compra continúa a la baja, después de caer nueve décimas y situarse en el 12%, la vivienda vuelve a crecer, tres décimas en mayo, y se coloca en el -10,5%. En el caso de los alimentos, la bajada se debe gracias al descenso de los precios de los productos básicos; por el contrario, la vivienda sufre el efecto de los precios de la electricidad, que disminuyen con menor intensidad que el pasado año.

Así queda la cesta de la compra

De entre los alimentos, el mejor dato lo presenta el pescado, tanto fresco como congelado, que tras reducir su precio casi cinco puntos sitúa su tasa en el 3,6%. Las frutas frescas, que meses atrás destacaban como el producto más barato del carrito, sufren una fuerte subida, pero se mantienen en un bajo 4%. Los frutos secos y las frutas en conserva se distancian y alcanzan el 5,7%. En niveles bajos destacan también la carne de ave (5,8%) y el pan que, después de haber atravesado valores muy elevados, se coloca en el 7,1%.

En el resto de carnes más allá de la de ave, todos los subgrupos (vacuno, ovino, porcino y otras carnes) experimentan retrocesos en su encarecimiento, a excepción de la de cerdo. La carne de ovino (8,2%) y la carne de vacuno (9,1%) reducen levemente su evolución. El conjunto de otras carnes, entre las que se incluye la de conejo, se sitúa en un 11,9%, siete décimas menos, y la carne de porcino es, con mucha diferencia, la que mayor incremento de precios mantiene con un 16,1%, tras mantenerse en el mismo porcentaje en abril y mayo.

Los huevos, los productos lácteos y los cereales continúan marcando la progresión más elevada de la cesta básica a un año vista. Sin embargo, los huevos han experimentado un fuerte retroceso y sitúan su subida de precios en el 13,2%, lejos del 15,8% de marzo. En sentido opuesto, la leche, si bien ha experimentado un notable retroceso de cuatro puntos, se mantiene en un elevado 23,6%. Los cereales y sus derivados también han descendido casi tres puntos, pero todavía marcan un 15,5%.

Las legumbres y hortalizas, productos que experimentaron una mayor reducción de la evolución de sus precios en abril, vuelven a dispararse en mayo. Así, tras crecer más de cuatro puntos y medio, pasan de un 11,2% a un 15,8%. En sus derivados, los preparados de legumbres y hortalizas han reducido medio punto su encarecimiento y se sitúan en el 12,8%. Como alimento concreto, la patata y sus preparados, claves en la dieta mediterránea, se ha encarecido por encima de la media y marcan una progresión del 17,9%, más alta que el 16,5% de abril.