Este martes, el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, y el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, han coincidido durante la celebración del IV Foro ATA de emprendedores y autónomos. Los dos mandatarios, que han tomado la palabra de forma consecutiva, no han desaprovechado la oportunidad de atacar al Gobierno desde la sede de la patronal de todos los empresarios. Primeramente, han sido introducidos por Lorenzo Amor, presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos, que no ha querido quedarse fuera y, como anfitrión, ha presentado ambos “tendiéndoles la muleta”.  

“Estamos viendo una campaña de hostigamiento, de insultos, de descalificaciones, que no se ha visto en la democracia española por parte de ningún dirigente. En ningún país de Europa se está señalando a los que generan empleo y actividad”, ha comenzado Amor. No se ha alargado mucho la intervención del líder de los autónomos, que tan solo ha querido dejar claro que “esto no es una reforma de pensiones, es una subida generalizada de las cotizaciones y de los impuestos”, antes de presentar a Garamendi. “Es un verdadero recorte de derechos, pagar más para recibir el día de mañana igual o menos”, ha sentenciado, sin aportar ningún dato ni análisis que justificase sus palabras.

Garamendi llama mentiroso a Escrivá

"Nosotros vamos a encargar a una serie de expertos que analicen de verdad esta reforma que se va a plantear y presentaremos los que pensamos que habría que hacer. En España podría haber ahorros por solapamientos de hasta 60.000 millones de euros del Estado”, ha apuntado Garamendi sobre las pensiones antes de entrar a la celebración del acto. “Se nos ha hurtado el debate”, ha lamentado, apuntando a Europa porque “lo único que quiere es casar la cuenta y aquí se ha dado barra libre por un lado diciendo aquí pagan los empresarios”. “Nos han remitido o la reforma de pensiones como si fueran lentejas”, ha lamentado, antes de sentenciar que “el ministro (Escrivá) no dice la verdad”.

Ya durante la celebración del acto, el líder de la patronal ha vuelto ha denunciar una persecución contra los empresarios. “Todos los males de la economía están en el mundo de la empresa, cuando somos justamente los creadores de riqueza, de empleo, los que pagamos impuestos y los que innovamos. No solo se ataca a la empresa, sino con nombre y apellidos”, ha esgrimido, recogiendo el guante que el presidente de ATA le había dejado anteriormente. Posteriormente, se ha centrado en las cuentas del Estado y en la comparativa entre el sector público y privado.

“La diferencia entre el mundo de la empresa y lo público es que en el mundo de la empresa, cuando las cosas no las pones en orden, hay una cosa que se llama quiebra, en lo público déficit público”, ha apuntado el empresario vasco, obviando que parte de las partidas públicas que han incrementado el déficit han ido destinadas a inversiones a través del ICO o la concesión de ERTEs, mecanismos sin los que muchas empresas podrían haber recuperado la fórmula de los despidos masivos (vía ERE) durante la crisis, entre otras cosas.   

El presidente de la patronal ha criticado también los Presupuestos Generales del Estado (PGE), por estar sustentados en una previsión de crecimiento del 2,1%. “No es creíble”, ha asegurado, haciendo alusión al 1,3% que estima la CEOE. Muy seguro se ha mostrado el empresario de que el crecimiento del PIB no alcanzará valores cercanos al 2%, a pesar de que las previsiones realizadas por la organización que preside para el curso fallaron por más de un punto el valor del 5,5% que finalmente se dio (la CEOE hablaba del 4,2% en julio).

“Se ha obviado el diálogo social”, ha continuado. “Las pensiones son un tema de todos los españoles que pivota sobre los empresarios y los trabajadores. La clave del futuro de las pensiones es el empleo, y de calidad, estoy de acuerdo”, ha reiterado Garamendi, para posteriormente asegurar que los empresarios “hemos tenido que decir no a la subida del Salario Mínimo Interprofesional porque no se ha tenido presente cual es la realidad de todas las pequeñitas empresas y autónomos con sus trabajadores”. No ha aclarado el presidente de la CEOE si se puede tener un empleo de calidad, que es “la clave del futuro”, cobrando 1.000 euros.

Feijóo intenta abordarlo todo

El empleo para un político del PP es el balance más importante de una empresa ha comenzado Alberto Núñez Feijóo su intervención desde la CEOE. Palabras pronunciadas frente a los empresarios que diseñaron y aprobaron una reforma laboral, junto con el Gobierno y los sindicatos, que ha creado más de medio millón de empleos. Reforma Laboral que el PP presidido por Feijóo intentó tumbar en el Congreso de los Diputados, a pesar de contar con acuerdo social y apoyándose en tránsfugas, y que tan solo evitó la poca preocupación por la materia laboral de un diputado popular.

“España es el país que peor ha gestionada la crisis desde 2019”, ha asegurado, haciendo alusión a la recuperación del Producto Interior Bruto (PIB), que sufrió una mayor caída en España por la dependencia del sector turísticos que, evidentemente, durante la pandemia no atravesó su mejor momento. El crecimiento sumando los dos últimos años es del 11%. “Somos el país con más paro de la Unión Europea”, ha añadido, sin mencionar que ha caído en más de un millón de personas desde 2021 (está por debajo de los tres millones), y registra dos millones menos de la cifra más alta alcanzada durante el Gobierno de Rajoy (5,04 millones en febrero de 2013). También ha hecho alusión al paro femenino y juvenil, que marcan los mejores datos de su historia desde que Yolanda Díaz llegó a Trabajo.

“Si a eso le añadimos una escasa ejecución de los fondos europeos”, ha continuado, obviando que España es el país más avanzado en la percepción de fondos next generation, al haber recibido tres desembolsos, de los que se han movilizado ya 23.300 millones de euros (de los 31.000 millones recibidos). De hecho, el 82% del total movilizado corresponde a la Administración General del Estado, que ahora solicita a las Comunidades Autónomas que cumplan con su parte, mientras Madrid intenta boicotear la cogobernanza y la aplicación del Plan de Recuperación.