Renfe se ha puesto manos a la obra para copar el mercado ferroviario francés de viajeros. La empresa pública española ha anunciado esta semana su estreno en solitario al otro lado de los Pirineos, con billetes desde 9 euros a la venta desde este mismo miércoles. Un plan de expansión explicado por el propio presidente de Renfe, Raül Blanco, que no solo está marcado por la llegada de Renfe para competir con los trenes franceses a partir del próximo 13 de julio. La compañía tiene claro que su plan de internacionalización del negocio empieza con su actividad en Francia y está dando todos los pasos para ello. 

Tras el anuncio del calendario oficial con el que Renfe entrará en el mercado francés, la compañía ha reforzado su plan de acción con dos nuevas rutas. Así, a las rutas Barcelona-Lyon y Madrid-Marsella, disponibles al público desde el próximo mes de julio, se suman nuevos destinos que la compañía prevé poner en marcha en 2024. Blanco ha aprovechado su presencia en el IV Simposio del Observatorio de la Movilidad y las Ciudades este martes para hacer un anuncio que refuerza sus objetivos de internacionalización. Se trata de la puesta en marcha de servicios públicos transfronterizos a partir de 2024, trenes de Renfe que unirán Cataluña y País Vasco con el sur del país vecino, algo parecido a un servicio de 'Cercanías' transfronterizo y un paso más para avanzar con su plan de acción al otro lado de los Pirineos. 

Las rutas adicionales anunciadas por el propio presidente de Renfe esta semana consisten en la unión de España y Francia por vía ferroviaria, especialmente entre las grandes ciudadades como Lyon, Marsella, Barcelona o Madrid, pero también nacen como una forma de vertebrar el territorio fronterizo a cada lado de los Pirineos. En concreto, los servicios públicos transfronterizos anunciados por Renfe para 2024 conectarán Cataluña y Occitania y País Vasco con Nueva Aquitania, zonas del sur de Francia muy próximas a España. Una medida para incentivar el movimiento transfronterizo de la población que reside en estas zonas. 

Tal y como ha explicado Blanco, las nuevas rutas de Renfe entre España y Francia empezarán a funcionar en 2024 con vocación de servicio público, con el objetivo de generar mayor cohesión y movilidad sostenible entre ciudades cercanas de ambos países. "No hay una fecha concreta prevista porque siempre sabemos que estos elementos son complejos", ha reconocido el presidente este martes. 

Renfe reconoce estar trabajando, desde hace meses, para convertirse en un operador ferroviario de referencia en el mercado francés y poder competir así con otros actores en una serie de liberalización similar a la que se desarrolla en el mercado ferroviario español. El objetivo de Renfe es reforzar su presencia en el país vecino y poder competir con la operadora pública francesa, SNCF, quien rompió el acuerdo unilateralmente el acuerdo entre ambas empresas públicas para operar en el país vecino hace poco más de un año. Ahora Renfe vuelve en solitario a las vías francesas con una apuesta reforzada por la alta velocidad. 

Ruta completa de la unión España-Francia: Barcelona-Toulouse y San Sebastián-Bayona

Las rutas transfronterizas de servicio público de Renfe en la frontera entre España y Francia, una especie de 'Cercanías' transfronterizo, contarán con varias paradas tanto a uno como a otro lado del territorio. Así, el proyecto para la conexión oriental -la diseñada por el equipo de Renfe para unir Cataluña y la región francesa de Occitania- contará con nuevas frecuencias de alta velocidad de Renfe entre Barcelona y Perpignan, así como la extensión del servicio hasta la ciudad de Toulouse. Los trenes de Renfe, que nacen con una consideración tarifaria de servicio Avant, conectarán Barcelona, Girona y Figueras con Perpignan, duplicando las frecuencias a esta estación, tal y como ha detallado Renfe. Además, los trenes tendrán, al menos, una extensión hasta Toulouse, con parada intermedia en Carcasone.

En el lado occidental, su otra gran ruta transfronteriza, Renfe planea conectar San Sebastián con Hendaya y Bayonne, creando rutas transfronterizas entre País Vasco y la región francesa de Nueva Aquitania. Estos proyectos suponen crear nuevas relaciones de transporte de servicios transfronterizos entre ciudades muy próximas a ambos lados de la frontera, generando una red de movilidad más sostenible y dando un paso más en el posicionamiento de Renfe como prestador de servicios de transporte en Francia.

Además de la unión entre las grandes ciudades de España y Francia, Blanco ha anunciado esta misma semana también su intención de llegar a París en 2024, justo antes de la celebración de los Juegos Olímpicos en la capital francesa en el mes de julio. "Así nuestros atletas podrán viajar a París con Renfe", anticipaba el presidente de Renfe este lunes, dejando constancia del compromiso de Renfe con el deporte.