La Navidad es una época de encuentros familiares y celebración en la que la especulación empresarial se abre paso con fuerza. Falsas ofertas, rebajas fraudulentas y subidas desmedidas de los precios llegan de la mano de la iluminación navideña y la cesta de la compra no iba a ser menos. Turrones, polvorones, bombones, ninguno se escapa al aprovechamiento de algunas cadenas de supermercados, que disparan sus precios en apenas días para aprovechar el momento de compra de los consumidores.
La organización de consumidores Facua ha advertido de ello con un estudio que ha seguido a 282 productos de las seis principales cadenas y que deja en evidencia a algunas distribuidoras. Carrefour es la peor para de la investigación, que revela que el supermercado francés ha elevado el precio de 34 de los 65 productos (52%) analizados por la asociación. La otra cadena de origen francés, Alcampo, es la segunda que más alimentos navideños ha encarecido, 14 de los 43 supervisados (33%).
En menor medida, Hipercor ha incrementado el 12% de los productos estudiados (ocho de 68). No obstante, no todas las distribuidoras han seguido el mismo proceder. Mercadona, Dia y Eroski mantienen en diciembre el precio de sus dulces navideños con respecto al que tenían en octubre e incluso han rebajado algunos de ellos, según los datos recabados por Facua estos meses.
Rubén Sánchez, portavoz de Facua, ha confirmado a ElPlural.com que la mayoría de productos navideños que llegan a los supermercados mantienen el mismo precio desde el día que entran por la puerta, “pero con excepciones”. “Una excepción importante es la de Carrefour, donde hay una mayoría, más de la mitad de productos, que sí han subido”, ha señalado. No obstante, ha querido tranquilizar a los consumidores asegurando que “en la mayoría de los casos” esta situación no se produce.
En lo relacionado con la anticipación de compras alimenticias a los meses previos a la navidad, el líder de la organización diferencia entre productos. Esta estrategia es muy común en las familias y pueden estar en lo cierto en algunos casos. Así, mientras seguir este proceder es positivo para carnes o pescados que subirán al acercarse las fechas y que, además, se pueden congelar; no es la mejor opción para los dulces navideños.
“No podemos recomendar que se realicen las compras de dulces navideños con antelación porque lo que vamos a hacer es consumirlos antes de las fechas de celebración y eso nos va a provocar un mayor gasto”, apunta Sánchez a este periódico. “Es decir, donde uno puede llevarse la sensación de que va a ahorrar diciendo ‘lo compro en octubre’, lo que va a hacer es consumirlo en octubre, noviembre y principio de diciembre y cuando se acerquen las fechas navideñas los comprará de nuevo”, explica.
Dulces que más se han encarecido
Facua ha analizado 19 marcas de turrones, 27 de bombones y 11 de polvorones y mantecados. Entre tantos, tres productos destacan por la subida de sus precios. La Caja Roja de Nestlé de 800 gramos ha pasado de 15,82 euros en octubre a 19,98 euros en diciembre en el supermercado Alcampo, lo que supone una subida del 26,3%. Un incremento de más de cuatro euros para aquellas personas que quieran disfrutar de los famosos bombones y acudan a por ellos a este supermercado.
Esta cadena de distribución francesa y la marca del producto son las protagonistas de otra de las tres subidas más impactantes. Concretamente, Alcampo también ha incrementado un 24,2% el precio de la caja de bombones Nestlé Dark Sublime 70% Cacao de 288 gramos. Este producto ha pasado de 8,84 euros en octubre a 10,98 euros en diciembre, una variación de más de dos euros. En cabeza, la mayor subida se ha registrado en el turrón de chocolate crujiente marca Trapa de 150 gramos en Carrefour.
Concretamente, en octubre su precio era de 0,99 euros, mientras que en noviembre subió a 1,07 euros, lo que supone un aumento de ocho céntimos en tan solo un mes que no se queda ahí. En estos momentos de diciembre, el producto alcanza ya los 1,31 euros, lo que representa un encarecimiento del 32% en apenas dos meses que, en montante, significa 32 céntimos más por cada turrón, menos que los anteriores en términos absolutos, pero mayor en términos relativos.
