El precio de los carburantes ha incrementado un esta semana después de varios meses de tendencia a la baja. Tras diez descensos consecutivos en el precio del diésel y cinco en la gasolina, los precios de ambos carburantes han subido un 0,42% y un 0,5%, respectivamente, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE). Sin embargo, estos ligeros aumentos no impiden que el gasóleo y la gasolina se sigan situando en niveles por debajo de los anteriores al estallido de la guerra de Ucrania, a finales de febrero de 2022.
En concreto, el precio del diésel se sitúa ahora en 1,415 euros el litro tras el incremento del 0,42%, y la gasolina, por su parte, en 1,584 euros el litro con su aumento de 0,5%. Antes del estallido de la guerra de Ucrania, el precio de ambos combustibles se situaba en 1,479 euros el litro en el caso del diésel, y 1,592 euros el litro para la gasolina.
Con el inicio del conflicto bélico, el Gobierno aprobó una bonificación mínima de 20 céntimos por litro de carburante para todos los ciudadanos, en el marco de un plan de respuesta al impacto de la guerra.
En lo que respecta a la comparación de precios de ambos combustibles, el diésel se mantiene, por decimosexta semana seguida, más barato que la gasolina. Se mantiene así en la situación habitual de antes de la invasión rusa de Ucrania, que provocó que el precio del gasoil fuese más caro que el de la gasolina de forma continuada desde agosto de 2022 y hasta mediados de febrero de este año, cuando se rompió esa dinámica.
En comparación con la primera semana de 2023, ya sin el descuento de 20 céntimos del año pasado aplicado por el Gobierno, la gasolina registra un descenso del 0,06%, frente al abaratamiento del 17% del diésel.
Muy lejos de los máximos históricos
Con estos niveles de precios, ambos carburantes se mantienen todavía lejos de los precios máximos que se registraron durante el pasado verano. En julio de 2022, la gasolina llegó a alcanzar límites de 2,141 euros el litro, y el gasoil, los 2,1 euros. En la misma línea, los precios de esta semana, expuestos en las líneas anteriores, siguen siendo más bajos que los que se marcaban cuando se aprobó la entrada en vigor de la ayuda de 20 céntimos por litro (que, desde comienzos de 2023, solo se mantiene para profesionales como transportistas, agricultores, navieras y pescadores): 1,818 euros en el caso de la gasolina y 1,837 para el diésel.
El precio de los carburantes depende de múltiples factores, como su cotización específica (independiente de la del petróleo), la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima, de la logística, los márgenes brutos y de las legislaciones y medidas concretas de cada país. Además, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de los carburantes, sino que lo hace con un decalaje temporal.
El precio en España, por debajo del de la media europea
A su vez, cabe destacar que, a pesar de la pequeña subida de esta semana, el precio de los carburantes en España se sigue manteniendo por debajo de los precios que se registran en el entorno europeo. Con estos niveles, el precio medio de la gasolina sin plomo 95 se mantiene en la Unión Europea en 1,719 euros el litro, mientras que en toda la eurozona se registra una media de 1,772 euros, lejos de los 1,584 euros que marca el contador en territorio español.
Con el diésel ocurre lo mismo: el precio en España también es inferior al de las medias de la UE y de la Eurozona, que son de 1,540 euros y 1,571 respectivamente, mientras que en nuestro país se mantiene en 1,415, a pesar de las recientes subidas porcentuales.
