La vicepresidenta segunda del gobierno y ministra de Economía, Nadia Calviño, ha iniciado la tarde de este miércoles compareciendo ante la Comisión económica del Congreso para realizar un análisis de la situación económica y financiera actual, ante un panorama marcado por la inflación que se sitúa por encima del 10%.

Calviño ha comenzado su intervención analizando en clave positiva la situación económica actual atendiendo a varios indicadores macroeconómicos. La ministra de economía ha calificado la demanda nacional como principal motor de crecimiento. Durante la intervención se ha puesto en valor también el crecimiento del PIB, que se cifra en un 6% desde 2020, una cifra superior a la anotada por la OCDE.

La titular de Economía también ha puesto en valor el “excelente comportamiento del mercado de trabajo” principalmente gracias a la nueva reforma laboral. La ministra ha asegurado que “cantidad y calidad van de la mano”. Asimismo, asevera que se han firmado más de un millón de contratos indefinidos desde la entrada en vigor de la reforma.

Calviño analiza las causas de la inflación

La vicepresidenta segunda también ha realizado un análisis sobre las causas de la inflación actual, achacando la situación económica a un cúmulo de factores entre los que se encuentran las consecuencias derivadas de la pandemia y los cuellos de botella en las cadenas de suministro que unido a la actual guerra de Ucrania están produciendo un incremento del precio de la energía.

Calviño ha asegurado que el incremento de los precios energéticos, así como el encarecimiento de las materias primas se han trasladado a la cesta de la compra y, por tanto, a la inflación subyacente (resultado de descartar los precios de la energía). No obstante, la ministra ha continuado con su discurso de estas semanas, incidiendo en la moderación de la inflación, que registró en agosto un 10,4%, moderando el IPC en 4 décimas y recortando el diferencial de la inflación con respecto a la zona euro.

La depreciación del euro frente al dólar

La ministra también ha tratado de explicar la depreciación del euro frente al dólar. De acuerdo con las estimaciones de los expertos, la paridad que se está alcanzando entre ambas divisas responde a las diferencias en las políticas monetarias del Banco Central Europeo (BCE) y de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed). Esta diferencia entre los tipos de interés de ambos organismos ha hecho que el euro roce la paridad con el billete verde que tiene como consecuencia el encarecimiento de los precios de la energía, ya que en los mercados energéticos la divisa que prima es la estadounidense.

Balanza de pagos favorable

Calviño también ha aprovechado su intervención para valorar la balanza de pagos españolas como “favorable”. La ministra argumenta que los altos precios de la energía, que repercuten también en las arcas públicas, se compensan con los ingresos provenientes del sector servicios y los ingresos derivados del turismo.

La vicepresidenta segunda ha asegurado que su intención es mantener la competitividad de las empresas españolas a través de bajadas de impositivas, ayudas directas, apoyo a la industria de la cogeneración y reformas estructurales para impulsar la inversión y atraer el talento, tal y como ya ha venido implementando el Ejecutivo.

En cuanto a los indicadores macroeconómicos la lectura resulta positiva. El déficit público continúa la senda del descenso y las estimaciones para este 2022 lo cifran en una reducción de 2 puntos, de acuerdo con la ministra. Asimismo, la ratio de deuda sobre el PIB ha caído hasta el 117% y la prima de riesgo española se sitúa entorno a los 250 puntos básicos, valores similares a los anotados en el periodo 2015-2016.

Las medidas del Gobierno ante el impacto de la guerra

Conforme a lo expuesto durante la comparecencia de la ministra, el Gobierno ha adoptado “medidas de gran impacto para contener la inflación y garantizar un reparto justo del impacto de la guerra”. Calviño ha desgranado las medidas separándolas en cuatro grandes bloques: apoyo a las familias, trabajadores y colectivos más vulnerables; apoyo al tejido empresarial y económico, la contención de los precios de la energía y un paquete de medidas adicionales.

Dentro del primer bloque se recogen medidas como: elevar el Ingreso Mínimo Vital un 15%, las ayudas de 200 euros a familias y autónomos, el bono social eléctrico y térmico, evitar los despidos a través del mecanismo de los ERTE, limitar la subida de los precios de los alquileres hasta un 2% y la congelación del precio del butano.

En lo referente al apoyo al tejido empresarial y productivo, el Gobierno ha puesto en marcha medidas como aplazar los pagos a la Seguridad Social y las ayudas directas a los sectores e industrias más afectadas como la agricultura, la ganadería, la pesca o la industria electrointensiva.

En cuanto a la contención de los precios de la energía, la batería de medidas impulsadas por el Ejecutivo también es amplia: la bonificación de los carburantes, rebajas del IVA a la electricidad y al gas, la aminoración de los beneficios extraordinarios y el tope al gas, medidas que Bruselas ya estudia emular en el resto de Europa.

Asimismo, en el bloque de medidas adicionales se engloban: la gratuidad del transporte ferroviario, la bonificación del 30% del transporte público urbano, y el gravamen sobre los beneficios a bancos y eléctricas.

La ministra ha recalcado que los precios de la energía no resultan circunstanciales, a pesar de que se han agravado por la guerra de Ucrania y asegura que los retos actuales se corresponden con dos factores distintos y diferenciados, por un lado, “los cambios geopolíticos que van más allá de la guerra” y por otro, el cambio climático, es por ello que Calviño ha llamado a dar una respuesta eficaz a los retos actuales, pero sin perder de vista aquellos que se darán a medio o largo plazo. “La prioridad es dar una respuesta eficaz a los retos actuales, pero mirando a los retos a medio y largo plazo”, ha concluido la ministra.