Septiembre ha llegado con problemas para la industria española, que ha tenido que recurrir al ERTE por el encarecimiento de la energía, así como por la subida de precio de las materias primas, todo ello consecuencia de la guerra de Ucrania. Empresas como Azuliber, Faurecia, Ferroatlántica o incluso Acerinox ya han anunciado la puesta en marcha de varios Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) desde el arranque del mes. Unos parones que se intensifican a mediados de mes, también en las plantas de ArcelorMittal.

Acerinox aplica un ERTE en su planta de Los Barrios (Cádiz) desde el pasado 1 de septiembre que afecta inicialmente a las áreas de acería, laminación en caliente y recocido caliente. No obstante, la medida ya estaba pactada con los sindicatos desde marzo de 2022 para empezar a aplicarse este mes de septiembre. La suspensión temporal tenía previsto mantenerse inicialmente 15 días en las plantas mencionadas y la compañía aseguraba que las áreas de puerto y mantenimiento no se verían afectadas, salvo que se quedaran sin producción.

El ERTE se pactó en marzo entre la empresa y los sindicatos con un año de duración. Por el momento se ha aplicado estas dos semanas y la empresa irá notificando los nuevos detalles de los paros en los siguientes meses de aplicación. 

Por su parte, Ferroatlántica también ha puesto en marcha un ERTE para este mes de septiembre en su planta de Cantabria que, por el momento, estará vigente durante nueve meses. También en este caso justifican el paro por el encarecimiento de la energía tras la guerra de Ucrania. Ferroatlántica cuenta con otra planta en Arteixo (A Coruña) afectada por un ERTE para 120 trabajadores.

La falta de semiconductores intensifica el problema

La industria del norte de España es de las más afectadas por el encarecimiento de la energía y las materias primas. Por ello, también la planta de Faurecia en Ourense ha recurrido al ERTE desde el 1 de septiembre para más de 200 trabajadores. A esta realidad también afectan los parones de su mayor cliente en la zona, Stellantis Vigo. Las previsiones de la factoría son que la crisis de semiconductores seguirá golpeando a la industria de la automoción hasta, al menos, finales de año.

En la costa de Castellón la planta más afectada es la de Azuliber, especializada en el diseño de azulejos a partir de arcilla, una de las principales exportaciones de Ucrania. La factoría ha parado totalmente su actividad, por lo que sus 177 empleados están acogidos a un ERTE desde principios de septiembre. Así lo han anunciado fuentes de Pamesa, propietaria de Azuliber y todo el entramado cerámico desde hace un año. Los cálculos de la empresa pasan por un aumento del 1.000% del coste de atomización a la hora de producir azulejos.

A estos parones se suma ahora el ERTE en ArcelorMittal, una de las grandes del acero en España, que se alargará hasta finales de 2023 en todas sus plantas situadas en el territorio nacional. La compañía ha planteado el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) a los sindicatos, que se pronuncian en contra de la medida por contar con beneficios de 13.000 millones de euros al cierre de 2021. 

También el presidente del comité de empresa de Alcoa San Cibrao, José Antonio Zan, ha alertado en las últimas horas de "problemas bastante graves" en la planta de A Mariña por el encarecimiento de la energía y, especialmente, el actual coste del gas. "Han comunicado problemas bastante graves y por los cálculos económicos y el coste del gas actual ya sabemos todos cómo estaríamos en 2023", ha advertido Zan tras la reunión.