No sólo los jubilados están perdiendo poder adquisitivo por la subida de sólo el 0,25% anual fijada por el Gobierno de Mariano Rajoy, también el resto de los trabajadores están viendo cómo sus salarios ascienden menos de lo que lo hace el IPC.

Según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística correspondientes a la encuesta trimestral de coste laboral, así como los del IPC de febrero, los costes salariales por trabajador llegaron a una media de 2.020,14 euros al mes, un 0,5% más que al acabar 2016, mientras el indicador de precios fue de un 1,1%.

Esto ha provocado que, por segundo año consecutivo, se devalúe la capacidad de poder de compra de los trabajadores españoles, en concreto seis décimas, pese a las continuas menciones del presidente del Gobierno a el despegue de la economía tras la crisis y que estemos creciendo sobre el 3% anual.

Situación “insostenible”

Tras conocerse estos datos, desde UGT ha señalado la “circunstancia anómala y profundamente injusta” que reflejan, en un contexto en el que la economía lleva cuatro años creciendo y las empresas no solo han recuperado el nivel de beneficios que tenían en 2007, antes de la gran crisis, sino que lo han superado y aumentan a un ritmo récord”.

Desde el sindicato califican de “insostenible” esta situación, “porque está dañando la actividad económica, perjudicando decisivamente las capacidades recaudatorias del Estado y de la Seguridad Social, y manteniendo a millones de personas en situación de pobreza y exclusión social, donde España se sitúa a la cabeza de la Unión Europea”.