Las inmediaciones del aeropuerto de Kabul, donde se agolpan miles de personas que esperan ser evacuadas, han sido escenario en la tarde de este jueves de tres explosiones que han provocado numerosas víctimas, según las informaciones recogidas por medios locales, que atribuyen este incidente a un atentado suicida.

El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha confirmado a través de su portavoz, John Kirby, que la explosión, ocurrida en la zona de la Abbey Gate, ha dejado decenas de víctimas. Hasta el momento se han contabilizado al menos sesenta fallecidos y más de 140 fallecidos.

Un portavoz talibán ha asegurado que entre las víctimas hay niños, mientras que medios locales como Pajhwok o Ariana hablaban en los primeros momentos de "decenas" de heridos. Los medios locales han difundido imágenes de los instantes posteriores al ataque, con civiles transportando a personas que habrían resultado heridas.

Las primeras hipótesis apuntan a un atentado suicida, según fuentes consultadas por las cadenas CNN y Al Arabiya, si bien fuentes locales hablan también de posibles disparos en las inmediaciones de la Abbey Gate, uno de los puntos de acceso clave al aeródromo durante el proceso de evacuaciones iniciado hace una semana y media.

Al menos doce militares de Estados Unidos​ han fallecido y quince figuran entre los heridos, según ha confirmado el Pentágono. El Ministerio de Defensa de Reino Unido, por su parte, no tiene constancia de que haya víctimas británica, informa la radiotelevision pública BBC. Tampoco se ha notificado algún fallecido de las fuerzas europeas.

Precisamente, la Embajada norteamericana en Kabul ya había lanzado el miércoles una alerta en la que recomendaba irse "inmediatamente" de las principales puertas y evitar acercarse a las inmediaciones del aeródromo salvo que hubiese "instrucciones" precisas por parte de algún representante de Estados Unidos. Varios gobiernos europeos han secundado en las últimas horas este aviso por el riesgo de atentado.