Las inmediaciones del aeropuerto de Kabul, donde se agolpan miles de personas que esperan ser evacuadas, han sido escenario de dos explosiones que han provocado, de momento, 50 víctimas mortales, informa Al Jazeera.

"Podemos confirmar una explosión junto al aeropuerto de Kabul", ha afirmado en Twitter el portavoz del Departamento de Defensa de Estados Unidos, John Kirby, que ha adelantado que seguirán ofreciendo "detalles adicionales" una vez los tengan. "La cifra de víctimas no está clara en este momento", ha dicho.

"Podemos confirmar que la explosión en la Abbey Gate fue el resultado de un ataque complejo que resultó en una serie de bajas civiles y estadounidenses. También podemos confirmar al menos otra explosión en o cerca del Hotel Baron, a poca distancia de Abbey Gate", confirmaba en un tuit posterior.

Cabe recordar que Abbey Gate es la puerta en la que se han visto las imágenes de los colaboradores españoles con pañuelos rojos para ser evacuados.

Las primeras hipótesis apuntan a un atentado suicida, según fuentes consultadas por las cadenas CNN y Al Arabiya, si bien fuentes locales hablan también de posibles disparos en las inmediaciones de la Abbey Gate, uno de los puntos de acceso clave al aeródromo durante el proceso de evacuaciones iniciado hace una semana y media.

La Embajada norteamericana en Kabul ya había lanzado el miércoles una alerta en la que recomendaba irse "inmediatamente" de las principales puertas y evitar acercarse a las inmediaciones del aeródromo salvo que hubiese "instrucciones" precisas por parte de algún representante de Estados Unidos. Varios gobiernos europeos han secundado en las últimas horas este aviso por el riesgo de atentado.

Los talibán advirtieron esta semana de que no facilitarían la llegada al aeródromo de ningún ciudadano afgano y también exhortaron a la población a abandonar la zona, aludiendo igualmente a razones de seguridad.

Biden anunciaba una respuesta "contundente" en caso de ataque

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha amenazado a los talibán con una respuesta "rápida y contundente" si atacan intereses norteamericanos en su actual campaña militar, en el marco de la cual Washington mantiene abierta una campaña de evacuación de funcionarios en la que participarán 5.000 militares estadounidense, 2.000 más de los autorizados inicialmente por la Casa Blanca.

Biden ha mantenido este sábado una videoconferencia con altos cargos de seguridad para analizar la situación sobre el terreno. Los talibán han logrado tomar en poco más de una semana dos tercios de las capitales de provincia, con conquistas estratégicas como la lograda este sábado en Mazar-e Sharif, y la presión aumenta sobre Kabul.

El mandatario estadounidense, que esta semana dijo no haberse "arrepentido" de sacar a las tropas, ha autorizado ahora que unos 5.000 militares gestionen la salida "ordenada y segura" del personal estadounidense y otros aliados, así como de los afganos que hayan ayudado durante la misión que está a punto de concluir, 20 años después de la invasión.

"Estamos trabajando para evacuar a miles que han ayudado a nuestra causa y a sus familias", ha aseverado en un comunicado. Estados Unidos, según Biden, seguirá vigilante ante "futuras amenazas terroristas" procedentes de Afganistán, lo que incluye también un aviso claro a los talibán: "Cualquier acción por su parte (...) que ponga en riesgo a nuestro personal o nuestra misión recibirá una respuesta militar rápida y contundente".

A la espera de una comparecencia del portavoz del Pentágono

El portavoz del Pentágono, John Kirby, ha informado de los ataques. A pesar de que había aunciado una rueda de prensa a las 16:30 hora española, la segunda explosión que se ha producido en el Hotel Baron, donde se encontraban los colaboradores británicos y es el punto de encuentro de miles de personas para acceder al interior del aeropuerto, ha provocado que se retrase.