La crisis del coronavirus ha cambiado de una manera radical el mundo tal y como lo conocíamos. Una permuta que ha afectado a todos los gremios, incluido el de la televisión. En este sentido, programas del mundo del corazón se han visto obligadas a dejar a un lado sus contenidos habituales para informar sobre la epidemia. Por ello, no han dudado en rodearse de expertos para poder resolver las dudas que puedan tener sus espectadores.

Un claro ejemplo de este cambio lo encontramos en Sálvame, uno de los formatos más exitosos de Mediaset, que ha cambiado por completo su contenido, y en las últimas semanas todo el programa gira en torno a la Covid-19. Y bajo este contexto, ha adquirido un papel determinante Jesús Sánchez Martos, flamante nuevo colaborador del espacio que dirige Jorge Javier Vázquez.

Martos es doctor en Medicina y Cirugía, tiene un diplomado en Enfermería y es Catedrático de Educación para la Salud de la Universidad Complutense de Madrid. Asimismo, además de todo este currículum, también fue consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid bajo el mandato de Cristina Cifuentes –otro de los últimos refuerzos de Sálvame-. Un cargo que dejó de ostentar en 2017, cuando la entonces presidenta de la CAM le destituyó después de ser reprobado por la Asamblea de Madrid por su mala gestión y tras aconsejar a los escolares que combatieras las altas temperaturas en los colegios con abanicos de papel. “Dobla, dobla, dobla… y tienes el abanico”, recomendó.

Sin embargo, su vinculación con el Partido Popular de la Comunidad de Madrid no se rompió tras su cese, puesto que Sánchez Martos fue recolocado como presidente de la Fundación para el Conocimiento Madri+d con un sueldo de 82.400 euros anules. Un puesto que dejó en diciembre de 2018.

Reportero en Telemadrid

Antes de ser elegido por la presidenta Cristina Cifuentes, Sánchez Martos fue el experto enviado por el Partido Popular a Telemadrid para defender la privatización de la gestión en los hospitales públicos de la región y que durante la pasada legislatura intentó llevar a cabo sin éxito el Gobierno presidido por Ignacio González.

Sánchez Martos acudió con asiduidad a la cadena autonómica en su momento de mayor politización para defender las líneas maestras del argumentario del PP en esta materia.

Además de participar en varias tertulias, Sánchez Martos se vio obligado a ejercer en alguna ocasión de reportero para ensalzar las bondades de uno de los hospitales madrileños de gestión privatizada, el de Torrejón de Ardoz.

Una vez llegó a la Consejería, es fácil encontrar declaraciones en las que defendía todo lo contrario. Tras ser ignorado por la Mesa en Defensa de la Sanidad Pública al hacer públicas sus propuestas, él afeó el gesto y aseguró: “Yo no creo que haya nadie que defienda más la sanidad pública que el consejero de Sanidad de la Comunidad”.