La recepción oficial en Washington que la organización de la Smithsonian Folklife Festival ha dado esta pasada noche con las delegaciones de Cataluña y Armenia no ha acabado bien. Los discursos de contenido enfrentado del presidente de la Generalitat, Quim Torra, y el embajador español en los EE.UU., Pedro Morenés, y la tensión política vivida en el interior ha acabado con la delegación catalana de artistas invitados abucheando al embajador y clamando por la libertad de los “presos políticos” y abandonando el acto en pleno, con Torra al frente. A la salida, el presidente ha denunciado que Morenés había hecho un discurso “ofensivo” para él y “para el país” por haberlo “tildado de mentiroso y haber puesto en cuestión la existencia de presos políticos”. y es que Torra había dedicado parte de su intervención a hablar, justamente, de la situación de los independentistas que están en la prisión o en el extranjero.
Según ha explicado a ACN la delegación catalana, después del turno de la delegación de Armenia, ha intervenido Torra, que ha hecho un discurso en la misma línea que últimamente acostumbra a dar, explicando que Cataluña vive una situación “de represión” y con “presos políticos y exiliados”. La intervención, fuertemente aplaudida por los asistentes catalanes miembros de los grupos y entidades que participan al festival, ha acabado con la delegación de Cataluña cantando Els Segadors de forma espontánea.
Justo después, el embajador español ha iniciado su intervención pública, y ha empezado a arrancar algún silbido y algún grito de algunos asistentes al escuchar que intentaba rebatir los argumentos explicados por Torra. Pero la situación se ha hecho insostenible cuando, según el propio presidente catalán, Morenés lo ha acusado de “ser un mentiroso” y ha negado que en España haya nadie en prisión por motivos políticos. Ha sido entonces cuando la delegación catalana de participantes en el festival lo ha abucheado fuertemente, han gritado “libertad presos políticos” y han boicoteado el final de la intervención de Morenés.
Ha sido en este punto cuando Torra y toda la delegación catalana han decidido irse del acto en protesta por lo que estaban escuchando. El embajador, por su parte, cuando ha finalizado, se ha despedido de la organización y ha salido del Museo de Historia Africana de la Smithsonian donde se hacía la recepción, privada y sin acceso a la prensa.
Afuera, Torra se ha reunido con la delegación que había abandonado el acto, mientras lo recibían con gritos de “presidente, presidente” y “libertad presos políticos”. Los participantes, fuertemente enfadados por el discurso de Morenés, han levantado un pilar y han interpretado bailes y canciones tradicionales delante de Torra. Poco después, el president ha vuelto a entrar para despedirse de los organizadores, explicar los motivos del que había pasado y abandonar definitivamente el edificio.
Torra ha hecho “un llamamiento al presidente español para preguntarle si el discurso del embajador viene de Madrid y si él, el ministro de Exteriores y el PSOE comparten el discurso de seis folios que ya tenía preparado y escrito para tildarlos de mentirosos y continuar falseando la historia del que pasa en Cataluña”. “Pido la dimisión inmediata del embajador, porque el grado de insulto al que hemos llegado no lo podemos tolerar y me gustaría que el gobierno español también haz pública su protesta”, ha concluido para reclamar una rápida intervención de Pedro Sánchez y su ejecutivo.
