No es Madrid para pobres. O al menos eso piensa un portavoz del PP en el Ayuntamiento que ha asegurado que las fuentes no se encienden en Madrid porque "atraen indigentes".

El momento se produjo durante la Junta Municipal de Distrito de Chamartín de este martes, qu tuvo que interrumpirse brevemente por las declaraciones de este portavoz del PP y que no sentaron bien ni siquiera entre las filas del Partido Popular. Cuando se produjo la discusión los asistentes estaban debatiendo las proposiciones, concretamente una que el Consejo de Proximidad había presentado instando al Ayuntamiento de Madrid a estudiar cómo de viable es la peatonalización de las calles los fines de semana, como ya ocurre en otros barrios de la ciudad, en especial los domingos.

“Gobernar no es tomar decisiones fáciles. A veces cuando abrimos una fuente, tenemos un vecino que nos dice que por qué se ha abierto esa fuente, porque atrae indigentes, porque atrae a gente que viene a beber agua y les sienta mal”, soltó sin escrúpulos el vocal vecino del PP Francisco Montoro. En ese momento, la reunión quedó interrumpida por el revuelo que se formó entre los presentes a cuenta de las palabras del miembro del PP. “Cuando se dice, cuando se dice”... intentó continuar.

“Vamos a hacer una cosa: todo el mundo obviamente puede decir su opinión y todo el mundo merece un respeto por ella”, comenzaba a hablar tras las palabras del vocal vecino la presidenta de la Junta de Distrito, Sonia Cea, que en ningún momento mandó a su compañero retractarse de sus palabras ni pedir perdón, y las disfrazó de vivir en “la democracia”. “La democracia también es saber escuchar, entonces, aunque no les gusten las opiniones de una persona, esa persona tiene todo el derecho democrático a expresarla. Entonces por favor vamos a dejarle que la exprese porque está en su turno de palabra”, expresaba al respecto la compañera de partido de Montoro.

Tras la interrupción del resto de grupos y las palabras de la presidenta de la Junta del Distrito, el portavoz del PP volvió a intervenir para insistir en que lo que había querido decir es que al gobernar, ocurren cosas como que “cuando se peatonaliza una calle hay otros vecinos que cuestionan la decisión. Para gustos, colores. No quiero entrar en política pero, Gobernar, es así”.

Sin fuentes

Lo cierto es que en Madrid una persona sin techo tiene dificultades para encontrar agua potable. En enero de 2023 el 39% de las 2.090 fuentes que hay repartidas por toda la ciudad se cerraron temporalmente y ha seguido así en diferentes momentos del invierno dejando sin alternativa para beber agua potable en la vía pública a miles de personas.

En junio del pasado año, las fuentes rotas eran 196. Prácticamente todas en zonas verdes. Ha sido la cifra más alta de fuentes "fuera de servicio" desde que el Ayuntamiento de Madrid comenzara a hacer públicos estos datos en 2016 bajo el gobierno de Manuela Carmena. Por poner un ejemplo, hace dos años, en octubre de 2020, las fuentes estropeadas o cerradas eran tan solo 90.

Previamente, en marzo de 2020 se precintaron todas para evitar contagios durante más de un año, de marzo de 2020 a mayo de 2021. Durante los primeros meses de 2021 era más fácil beber agua en una discoteca que en la vía pública a pesar de que la evidencia científica señalaba que era más fácil contagiarse por aerosoles que por beber agua en la calle. Además, las fuentes para refrescarse, como las que hay en Madrid Río, las que lanzan chorrazos de agua desde el suelo, no abrieron hasta junio del año pasado.

Estas fuentes inutilizadas de hace tan solo unos meses se encontraban en zonas verdes de la ciudad de Madrid, con un notable Villaverde, que tenía una de cada cuatro fuentes reventadas.  Durante las últimas décadas, la presencia de fuentes en las calles ha ido perdiéndose poco a poco, mientras el Ayuntamiento las concentraba en plazas y parques, evitando espacios para beber en las calles de Madrid.