La de hoy lunes es una jornada de reflexión por las miles de personas que ayer salieron a las calles. En Galicia, las cuatro capitales de provincia congregaron en total a “más de 30.000 personas”, según reveló el PPdeG. En realidad, a pesar de que la cifra es importante, desde diferentes sectores se ha restado importancia a la cantidad, comparándolo con otras manifestaciones, celebradas incluso entre semana, que han superado ese dato, por ejemplo la última a favor de la sanidad pública y de la Atención Primaria y contra los recortes celebrada en Vigo, celebrada el año pasado y que reunió a más de 25.000 personas, una cantidad similar (en torno a 22.000 asistentes) a la que tuvo lugar en febrero también de 2022 en Santiago de Compostela.

Sin embargo, los 'populares', con el presidente del partido en la región y máximo responsable de la Xunta a la cabeza, mostró su satisfacción desde el primer momento. Alfonso Rueda acudió a la concentración celebrada en su ciudad, Pontevedra, donde el ex ciclista Óscar Pereiro fue el encargado de leer un manifiesto en una plaza de la Peregrina abarratoda de gente y de banderas españolas.

Para Rueda la protesta ha sido un "clamor" de la sociedad. A su juicio, "va mucho más allá de posicionamientos políticos" porque "la gente es consciente de que es un momento fundamental de la historia de nuestro país y desde Galicia no lo vamos a permitir".

Las 30.000 personas que, según las cuentas del PP, salieron a las calles en la comunidad autónoma (Pontevedra y A Coruña con 10.000, en Lugo más de 4.000 personas y otras tantas en Ourense), contrastan con la cifra de apenas 13.000 asistentes que dio la Delegación del Gobierno en Galicia (6.500 en A Coruña, 4.000 en Pontevedra, 2.500 en Lugo y 300 en Ourense).

Actitud "trumpista"

Frente al triunfalismo de los 'populares' gallegos se situaron los principales destinatarios de su mensaje: los socialistas.

Su secretario de organización, José Manuel Lage, no tardó en advertir ayer mismo a Rueda y a su formación que “la mayor manifestación de la cidadanía fue el 23 de julio”, en referencia a las elecciones generales de esa jornada que dieron como resultado una victoria del PP, aunque menor de lo que vaticinaban las encuestas. Por ello, Lage fue claro al reclamar a Feijóo que abandone la actitud que calificó de “trumpista”, y acepte de una vez por todas lo que decidieron los españoles ese 23J.

Al margen de estrategias políticas de las formaciones que alientan este tipo de acciones, el dirigente socialista no dudó en hablar este domingo de que esta es “una pataleta” de Alberto Núñez Feijóo, que sigue sin reconocer el resultado electoral.

Frente a esto, el ex presidente gallego, que parece haber dejado atrás el talante moderado del que siempre hacía gala fuera de la región, en palabras de Lage “intenta ganar en la calle lo que no ganó en las urnas”.

En una clara estrategia electoral pensando en los próximos comicios autonómicos, José Manuel Lage trató de desacreditar la importancia de Alfonso Rueda como máximo responsable del PPdeG y su falta de liderazgo al indicar que actúa como “un mero subalterno del propio Feijóo” y no como presidente de Galicia.

Un apartado particular dedicó a los ataques que están sufriendo las sedes socialistas. A los 'populares' les acusó de alentarlos “con su silencio”. Precisamente, hoy mismo se denunció un nuevo ataque por parte del Partido Socialista a una de sus sedes, en este caso a la Casa del Pueblo del municipio pontevedrés de Poio.