En comunicación existen algunos 'trucos' que convierten una marcha, protesta o concentración minoritaria en multitudinaria por arte y magia de la fotografía, la perspectiva y el enfoque.
A lo largo de las décadas, por ejemplo, el uso de muchas, decenas, cientos, miles de banderas trasladan la sensación de muchedumbre. Un recurso muy usado en época de Hitler o, más recientemente, en los desfiles patrióticos organizados por la ultraderecha española y seguidos por la que se autodenomina, según el día y lo que marquen los medios de la cuerda ideológica, moderada.
El otro 'truco' tiene que ver con el encuadre y/o la perspectiva de la imagen. Este quizás sea el más tosco, pero también es el más sencillo. Sin embargo, en ocasiones, ni siquiera la 'maniobra' es capaz de tapar la realidad del fracaso de la convocatoria.
Es lo que hoy le ha pasado al Partido Popular de Galicia. Hasta la ciudad olívica se desplazó la secretaria general de los 'populares' en la región, Paula Prado, que quiso acompañar a la candidata de su formación a la alcaldía viguesa, Marta Fernández-Tapias.
El motivo de la convocatoria era protestar contra la ley del Solo Sí es Sí del Gobierno central, cuya modificación mantiene un conflicto abierto entre los dos socios de la Moncloa. La aspirante a desbancar a Caballero incluso llevaba los deberes hechos, al recordar que "los 9 beneficiados por esta ley en Vigo y sus más de 11 años de rebaja de pena son razones más que suficientes para reaccionar en la calle contra esta atrocidad"; como subrayó el PP en un comunicado.
Así que allá se fueron las números uno 'populares' a nivel local y regional. Pancarta en ristre y mensaje claro, directo, conciso y con el objetivo claramente marcado (esto también es comunicación): “Sánchez, pide perdón a las víctimas, sí o sí”. El lema estaba acompañado por el hashtag #NoEsUnChiste.
Y ahí se plantaron. En la zona más comercial de Vigo, en plena entrada a la calle del Príncipe, la que se abarrota de gente por las famosas luces de Navidad que impulsa el alcalde socialista, Abel Caballero.
No obstante, ni siquiera la presencia de ambas dirigentes del PP gallego consiguió atraer a simpatizantes porque apenas unas 40 personas respondieron a la cita. Eso sí, aunque el pinchazo ha sido más que evidente, el mensaje no dejaron de lanzarlo y el mismo tiene nombre y apellido: Pedro Sánchez.
A lo que no se refirieron las altos cargos 'populares' fue al aborto, tras las últimas declaraciones del líder nacional de la formación, Alberto Núñez Feijóo, negando que se trate de un derecho fundamental de las mujeres. Esta tarde, siguiendo la estrategia marcada desde la calle Génova de Madrid, el PP gallego y vigués tiró de manual y argumentario para personalizar las consecuencias de la nueva ley conocida como del solo sí es sí en la figura del presidente del Gobierno.
Hasta el momento, gracias al apoyo de la artillería mediática, estirar los argumentos parece dar a los 'populares' rédito electoral. Sin embargo, observando el cada vez menor tirón de sus convocatorias locales, tal vez la estrategia se dirija hacia otros argumentos, sin escapar, eso sí, de la controversia provocada por esta normativa.
