"El aborto es el derecho exclusivamente de una mujer de acuerdo a la ley de su país". Estas han sido las palabras que ha pronunciado este miércoles el líder nacional del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, en relación con la interrupción voluntaria del embarazo y sobre las discrepancias del partido al respecto.

Es así como algunos cargos del ala más conservadora de la formación han expresado su malestar por estas declaraciones, defendiendo así que todos los afiliados, incluido el presidente, "se deben a lo que pone en los Estatutos del partido" y esas reglas internas "solo se pueden modificar en un congreso" del PP.

El PP organizó su último congreso con debate ideológico en febrero de 2017, bajo la presidencia de Mariano Rajoy. Ahí, la ponencia social quedó aprobada en estos términos: "El PP está firmemente comprometido en la defensa y protección del derecho a la vida. Por eso consideramos que el aborto no debe entenderse como un derecho sino como un fracaso de la sociedad", defendieron.

"Si vamos a las elecciones de este año con un programa electoral distinto a lo que dicen los Estatutos, alguien tendría que dar explicaciones", ha señalado a Europa Press uno de los cargos populares, que confiesa que "no le han gustado nada" las palabras de Feijóo a favor de la ley de plazos.

El debate interno del PP se recrudece

Feijóo ha indicado sobre la cuestión que es "necesario y compatible" regular la interrupción voluntaria del embarazo con el apoyo a las mujeres que quieran ser madres. "No considero que el aborto sea un derecho fundamental porque no está recogido así en la Convención de Derechos Humanos", ha declarado tras visitar la Casa Roland McDonald.

"Hoy juega a que no es un derecho fundamental. ¡Solo faltaba! No son acertadas sus palabras", ha proclamado un dirigente del PP a modo de réplica. Otro veterano cargo 'popular' también ha cargado contra el presidente del PP por considerar el aborto como un derecho de la mujer. "El aborto no debe tener la categoría de un derecho, ni fundamental ni nada", ha sentenciado.

Es así como las palabras de Feijóo no han amainado el debate interno en las filas del PP sino, al contrario, lo han recrudecido. "Una vergüenza", ha declarado visiblemente enfadada una de las personas que firmó el recurso del partido contra la ley de plazos en 2010.

A la espera de conocer la sentencia del Tribunal Constitucional avalando la ley de plazos, fuentes del PP que participaron en ese recurso contra el aborto en 2010 no descartan llevar este asunto al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo, en especial lo relativo a las recusaciones.

Además, algunas de las fuentes del sector 'provida' del PP alertan de que este "giro" en el aborto puede provocar una fuga de votos en favor de Vox ante las citas electorales de este 2023. Ahora, aún más, cuando la formación de Santiago Abascal ha registrado una proposición no de ley para derogar "inmediatamente" la ley del aborto y, a la par, buscar la expansión de las medidas promovidas en Castilla y León. 

El debate interno generado no ha pasado desapercibido en 'Génova', que ha sondeado a algunos territorios para saber si hay militantes del PP que se han quejado o se han dado de baja por la polémica ahora más dilatada. En algunas sedes sí que se han producido llamadas de afiliados pidiendo aclaraciones sobre la posición expresada por Feijóo, unas explicaciones que se están ofreciendo con tranquilidad, según las fuentes consultadas.

Ante esa iniciativa del partido de Santiago Abascal, el presidente del PP ha criticado hoy que tanto el PSOE como Vox estén intentando "polemizar" con este asunto. "Y nos gustaría que este asunto fuera objeto de un gran consenso social porque el asunto lo merece", ha manifestado, para insistir en que el PP no va a coaccionar a aquellas mujeres que quieran interrumpir voluntariamente el embarazo de acuerdo con la ley.