El día de ayer pasó a la historia en Vigo por ser la primera vez que en su puerto coinciden en una sola jornada hasta cinco cruceros. Este récord histórico, bien visto por los empresarios de varios sectores, tiene, sin embargo, a juicio de algunos colectivos, su parte negativa y no menor.

Entre ellos destaca la denuncia realizada por Ecoloxistas en Acción que, para empezar, recuerda hoy que la presencia de estos transatlánticos supone que lleguen de golpe en un único día hasta 15.000 turistas, lo que se traduce, dicen sus responsables, en un “despliegue a gran escala de un turismo insostenible y fuertemente agresivo con el medio ambiente”.

Las previsiones apuntan, según los datos de la organización naturalista, a que este año 2023 en el puerto de la ciudad olívica “se superarán las 100 escalas”, lo que significa, a su vez, que llegan 250.000 pasajeros, “desbordando los datos de los últimos años en los que la media era de 160.000 turistas y alrededor de 75 escalas anuales”.

Estas cifras comparadas con las correspondientes al presente ejercicio ponen de manifesto que Vigo se consolida como parada cada vez más habitual en algunos trayectos de cruceros que parten, sobre todo, del Reino Unido.

Del análisis de la parte negativa de estos números se ha encargado Ecoloxistas en Acción Rías Baixas. Para sus responsables es “precupante” el incremento de la actividad de estos buques porque, según señalan, “es incompatible con la protección de la salud y del medio ambiente”. Esto es así porque se trata de un tipo de turismo “de altas emisiones contaminantes (SOx, NOx y partículas ultrafinas).

Al margen de lo anterior, los aspectos que no son positivos también se centran en el hecho de que, el turismo de estas características, es una “actividad extractivista por el uso intensivo que hacen de recursos naturales como el agua”, denuncian añadiendo que provoca una “explotación industrial que causa enormes impactos sobre las poblaciones destinatarias, así como a los ecosistemas litorales y marinos como los frecuentes alcances a cetáceos”.

En la Zona de Bajas Emisiones

Ecoloxistas insiste en que es preciso recordar que el puerto de transatlánticos de la ciudad viguesa está en la actualidad situado “en un área que está previsto que sea incluida en una Zona de Bajas Emisiones en cumplimiento de la Ley de Cambio Climático, por lo que esta actividad altamente emisora es incompatible” con la citada declaración.

Xaquín Pastoriza, coordinador del grupo Rías Baixas de Ecoloxistas en Acción, no duda al afirmar que “denunciamos también la operación de maquillaje verde de los cruceros y los puertos con falsas soluciones tecnológicas como el gas natural licuado, el biometano o el hidrógeno verde”. Este tipo de combustibles, “además de ser inviables, tendrían enormes impactos climáticos, sociales y ecológicos", agrega.

Desde hace tiempo existe planes de ampliación de puertos que prevén su ejecución mediante el relleno en el mar, “como el anunciado por la Autoridad Portuaria de Vigo”, recurdan desde el colectivo.

Estos planes los “rechazan” de plano, al tiempo que instan a las administraciones regional y local “a situarse al lado de la cidadanía y el interés común, en virtud de sus competencias sobre medio ambiente, salud y turismo”. En este sentido, abogan porque Xunta de Galicia y Ayuntamiento vigués empleen todos los medios disponibles para “oponerse a las ampliaciones portuarias y al turismo de cruceros en nuestras ciudades”.