Los primeros compromisos de 2023 ya han comenzado a incumplirse y, a pesar de la obligatoriedad que establece la Ley de Cambio Climático, la gran mayoría de municipios llamados a implantar nuevas zonas de bajas emisiones (ZBE) no han cumplido aún con el mandato. Concretamente, los 149 municipios españoles de más de 50.000 habitantes deben cumplir y restringir el tráfico en determinadas zonas, mandato que hasta el momento tan solo han cumplido Sevilla y Zaragoza. Estas dos ciudades se suman a los 102 kilómetros cuadrados de Barcelona y los 60 de Madrid, aunque con un perímetro mucho menor que ronda el kilómetro cuadrado en el caso de la capital andaluza y el medio kilómetro en la capital aragonesa.

A estas dos se suma una ampliación del perímetro establecido en Madrid, al que se sumarán próximamente dos municipios más de la comunidad (Fuenlabrada y Alcobendas). El mismo proceder se seguirá en Andalucía, donde en breve estará preparado el área de tráfico restringido de Córdoba. No obstante, se desconoce por el momento cuando estarán preparadas las ZBE de dos municipios madrileños más (Parla y Coslada), Burgos, La Laguna (Santa Cruz de Tenerife), Melilla, Talavera (Toledo), Ciudad Real y Algeciras (Cádiz). El retraso, por el momento, no acarreará sanción para estas zonas, según ha asegurado el Ministerio de Transición Ecológica, que espera que la implantación siga su curso.

Las mencionadas zonas de bajas emisiones, localizadas habitualmente en el centro de las ciudades, prohíben el acceso a los vehículos más contaminantes siguiendo el etiquetado (las famosas pegatinas) establecido por la Dirección General de Tráfico (DGT). El castigo por acceder a estas zonas sin cumplir los requisitos suele suponer una multa de entorno 200 euros, aunque en las nuevas ZBE de Sevilla y Zaragoza el incumplimiento no acarreará sanción hasta más adelante.

Los vehículos que más verán limitada su movilidad en las nuevas zonas, igual que ya ocurre en la capital y la ciudad condal, serán los etiquetados como A y los que no cuenten con etiqueta, es decir, aquellos de gasolina matriculados antes de 2001 y los diésel previos a 2006. Dependiendo de la ZBE, los vehículos B (gasolina anterior a 2006 y diésel anterior a 2015) y C (gasolina a partir de enero de 2006 y diésel a partir de septiembre de 2015) pueden verse también afectados. Por el contrario, los grandes beneficiados son los híbridos (Eco) y los híbridos enchufables y eléctricos (cero emisiones), que salvo en zonas de acceso prohibido a vehículos particulares pueden circular por toda la red.

Madrid, la más restrictiva

Madrid Central, la primera zona de bajas emisiones implantada en España y que el actual alcalde, José Luis Martínez-Almeida, prometió eliminar, no solo sigue en funcionamiento, sino que ha ampliado su perímetro de actuación. La primera zona delimitada en 2018 abarca cinco kilómetros cuadrados e impide el acceso a los no residentes con pegatina A y a los vehículos B y C, salvo que, en el caso de estos dos últimos, estacionen en un aparcamiento público en el interior de la ZBE. Ahora, las limitaciones para los vehículos A abarca la M-30, incluyendo el área que se encuentra en su interior, lo que suponen un aumento hasta los 60 kilómetros cuadrados. La última zona de la capital se encuentra en plaza Elíptica y ha supuesto múltiples problemas por encontrarse en uno de los accesos a la zona céntrica.

Sin embargo, no será hasta mediados de año cuando comience a multarse en las nuevas zonas de la capital, sanciones que ya se imponen en las ZBE primitivas. De cara a futuro y, a pesar de que actualmente se ha dado una prórroga a furgonetas de reparto con pegatina B y a comerciantes, la previsión es que en el año 2025 ningún vehículo con etiqueta A, sea residente o no, pueda acceder al municipio.

En el caso de Barcelona, donde se ven afectadas la ciudad y los municipios de L'Hospitalet, Cornellà, Sant Cugat, Esplugues y Sant Adrià, la ZBE alcanza un perímetro mucho mayor; no obstante, las limitaciones y restricciones son mucho menores. De esta manera, los vehículos A, independientemente de que sean residentes, no pueden circular por el perímetro establecido los días laborales entre las 7:00 y las 20:00 horas. Por el contrario, los vehículos B y C no se ven afectados y pueden circular con total normalidad.